Panazos y verdurazos, disquisiciones sobre las cifras del índice de pobres y una factura que concentra todas las responsabilidades políticas en Mauricio Macri exime de las suyas a los gobernantes de otros distritos. Tal es el caso del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, cuyo distrito es testigo del aumento de las tasas de pobreza e indigencia aunque pase por desapercibido.

Según el último informe del Centro de Estudios de la Ciudad (CEC), dependiente de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, la cantidad de hogares porteños en situación de pobreza alcanzó el 14,7%, superando el 9,4% del mismo trimestre de 2015. “Esto significa que hay 225.000 pobres más”, desde el momento en que Rodríguez Larreta arribó a Bolívar 1 y Macri se mudó a Balcarce 50, advierten Adriana Clemente, ex vicedecana de esa casa de estudios, Inés Albergucci y Agustín Mario, responsables del trabajo de investigación.

Asimismo, el informe revela que el porcentaje de personas en situación de pobreza es de un 20,9%, lo que representa un incremento de más de siete puntos porcentuales en tres años. “Esto significa que una de cada cinco personas en la Ciudad es pobre”, aseveran.

De manera categórica, el paper del CEC destaca que actualmente “hay un 54% más de personas en situación de pobreza y un 98% de personas en situación de indigencia que al tercer trimestre de 2015, tendencia que no parece tener modificaciones a la luz de los aumentos de precios en particular de la canasta básica alimentaria, tarifas y transporte”. En cuanto a la indigencia, medida que contempla a los hogares cuyos ingresos mensuales no alcanzan a cubrir la Canasta Básica Alimentaria (CBA - Línea de indigencia), los datos son apabullantes: si se atiende a la comparación del tercer trimestre de cada año,se notará que en 2015 se registraron 100 mil indigentes, en 2016 146 mil, en 2017 llegaron a 140 mil y el año pasado la cifra trepó a 198 mil. En síntesis, bajo el gobierno de Rodríguez Larreta casi se duplicó la indigencia.

La geolocalización de la desigualdad

Clemente explicó a Diagonales que el trabajo sirve no sólo para “actualizar algunos de los datos e indicadores socio-económicos” sino también “su distribución territorial”. La parte del documento elaborada por Mario detalla que se amplía la “disparidad en los modos de participación en el mercado de trabajo, en el nivel educativo de las personas, en las condiciones de hacinamiento y de salud relacionadas con la mortalidad infantil, entre una serie de aspectos”, si se compara lo que sucede en comunas del norte y el sur de la Ciudad. “La desocupación es un 134% más en el sur que en el norte”, consigna, y añade que existe “un 77% más de hacinamiento en el sur y un 50% más de mortalidad infantil en la relación norte-sur”.

Como corolario, los académicos remarcan que “en 2015, el 10% más rico tenía un ingreso 17 veces mayor que el del 10% más pobre y, en 2018, dicha brecha se amplió a 25 veces”.

No es casual que, en ese contexto, uno de los referentes de la fracción disidente de la CTA porteña que responde a Ricardo Peidro, Pablo Spataro, haya protagonizado “un panazo” junto a los trabajadores del Indec que elaboraron el último índice de pobreza, cuya cifra trepa al 32 por ciento a nivel nacional. En declaraciones a FM La Patriada, el dirigente ceteísta graficó la agudización de la crisis con una imagen: “en nuestros comedores hay lista de espera”, dijo.