El actual técnico de Independiente, Ariel Holan, estuvo presente anoche en en el programa del Gato Sylvestre en C5N y habló sobre el apriete de la barrabrava que sufrió en el club el año pasado y destacó el apoyo de Hugo y Pablo Moyano. A su vez, agradeció la ayuda de Cristian Ritondo, Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires. 

"El problema con la barra es una larga cadena de sucesos que empezaron en Mar del Plata en 2017, previo al segundo clásico del verano. Hugo y Pablo me dijeron que si le daba un peso a Bebote Álvarez no podía seguir", aseguró el director técnico de Independiente, Ariel Holan y recordó: "Me quería ir del club, pero me dieron las garantías para poder continuar". 

En ese sentido, el director técnico de la primera del Rojo relató: "El tema de la violencia y los barras es un problema. Es una flagelo y dificultad a los que se han tenido que enfrentar la mayoría de los directivos", explicó y agregó: "El presidente y vice presidente del club (por Hugo y Pablo Moyano) eran las personas con las que hablaba en el momento en el que yo decía que se debía resolver, pero a mi me apretaba Bebote Alvarez"

Además, comentó: "El ministro me dio su apoyo, mi familia tiene custodia. Yo me quería ir del club, pero no solo Pablo Moyano, sino también Cristian Ritondo me dieron las garantías para poder continuar y cuando fui a declarar dejé en claro que no le iba a dar un peso al Bebote Álvarez", resaltó al recordar la cuando un grupo de barrabravas encabezados por Álvarez le solicitaron 50.000 dólares para ir al Mundial de Rusia 2018. 

Luego de ese hecho, en octubre de 2017, el juez Luis Carzoglio, titular del Juzgado de Garantías N° 9 de la departamental Lomas de Zamora, ordenó la detención de Pablo Bebote Álvarez, líder de la barra brava de Independiente, acusado del delito de amenazar y extorsionar al director técnico de Independiente, luego de un entrenamiento en Villa Domínico.

Sobre el final Holan volvió hacer hincapié en el apoyo de los Moyano: "A mi me dan total libertad, no me dicen que tengo que hacer, me permiten elegir a los periodistas. No bajan nunca al vestuario, se los tengo que pedir yo. Puedo desempeñar mi trabajo con total comodidad. No solo yo y mi cuerpo técnico, sino también los jugadores, porque cobramos en tiempo y forma".