La reunión de Comité Ejecutivo de la Superliga, que se llevó a cabo el pasado jueves en Puerto Madero, arrojó algunos datos certeros de cómo se desarrollará el fútbol en Argentina en la próxima temporada. En el encuentro, que estuvo encabezado por el presidente Mariano Elizondo, donde se definió que los clubes respetarán el estatuto y no habrá descensos a fin de año.

Al final de la Superliga que se está disputando, habrá cuatro descensos y dos equipos ascenderán desde la segunda categoría. Y por ahora el fútbol argentino no se alineará con el calendario Conmebol, es decir, continuará con sus certámenes de agosto a junio, excepto por la Copa Argentina.

Esta reunión arrojó que no habrá descensos a fin de año, una especulación que había tomado fuerza durante los último meses. La segunda edición de la Superliga también comenzará en agosto, con 26 conjuntos. Cuatro descenderán en junio de 2019 y dos representantes del Nacional B se sumarán a Primera.

La opción que reúne mayor consenso es la de un torneo largo, a una rueda, como se está desarrollando la edición actual. Como contaría con 25 fechas y sobrarían fines de semana. En consecuencia, crecen las posibilidades del nacimiento de un nuevo torneo: la Copa de la Superliga.

Se trataría de un certamen de eliminación directa, símil Copa Argentina, que ocuparía los fines de semana ociosos. Como la Superliga estará compuesta por 26 instituciones, podrían jugar como "invitados" los seis mejores clasificados de la B Nacional, para que la llave la integren 32 equipo.

Las definiciones en cuanto al formato llegarán en la próxima reunión. Mientras tanto, la AFA deberá resolver cómo se disputará la B Nacional 2018/2019, que también está en debate.

Hay otro proyecto que contempla el ascenso masivo de equipos del Federal A y de la Primera B Metropolitana hasta completar 40 cupos, es decir, 20 del Interior y 20 de los directamente afiliados, y regionalizar la competencia. Así como el proyecto tiene sus adeptos, también cuenta con encendidos detractores.

Por lo pronto, el dato concreto: solo cuatro clubes padecerán la frustración del descenso durante 2018. Y un nuevo torneo, la Copa de la Superliga, asoma como una nueva estrella para bordar cerca del escudo del que se consagre campeón.