Tras una nueva derrota, la tercera al hilo, el Lobo descansó este jueves para tratar de dejar atrás lo ocurrido frente al elenco sanjuanino y ya empezar a pensar en el cruce frente a River, del próximo miércoles 28, en Mar del Plata y por la semifinal de la Copa Argentina.

La caída de ayer, repercutió fuerte en el ánimo del plantel y también del cuerpo técnico encabezado por Pedro Troglio, quien ayer puso en duda su continuidad en caso de que con River no se diera un buen resultado. Lo preocupante no solo pasa por la situación comprometida que tiene en la tabla de promedios, sino que la mayor preocupación pasa por el flojo rendimiento que viene demostrando el equipo, sin ideas ni fuerzas para revertir un resultado.

Teniendo en cuenta este momento, es una verdadera incógnita cuál será la formación. Troglio probará variantes para llegar de la mejor manera el duelo con el Millonario. Mucho dependerá lo que ocurra en el Minella, del resultado que obtengan los de Marcelo Gallardo en la final de la Copa Libertadores.

Además, sin Piovi, con Guevgeozián lesionado y Lorenzo Faravelli  desgarrado, las opciones para en el entrenador son cada vez menos. Se viene días cargado de trabajos para la institución Mens Sana que rápidamente deben dar vuelta la página.