Pasado el mediodía, el plantel del Lobo se hizo presente en Casa Rosada para darle el último adiós, a su entrenador Diego Armando Maradona.

Luego del entrenamiento de esta mañana, donde el plantel se junto aunque no practicó, pero si se realizaron los estudios de PCR, la delegación se trasladó en micro hasta la Capital Federal para despedir a su DT.

El clima estuvo invadido por una enorme emoción, porque los jugadores pudieron acercarse hasta el féretro y dedicarle las últimas palabras a Diego. Muchos se arrodillaron y no pudieron evitar las lágrimas. Otros llegaron con flores para dejarle. 

Una de las personas que más se vio conmovida fue Sebastián Méndez, el Gallego, quien era la mano derecha del Diez en el Lobo y se tuvo que hacer cargo del equipo en los últimos tiempos cuando Diego no pudo estar presente físicamente.