A pesar del dolor y el golpe por el fallecimiento de Diego Armando Maradona, Gimnasia salió a la cancha en Liniers a jugar el partido correspondiente por la fecha 5 ante Vélez y el homenaje para su ex entrenador fue de la mejor manera: triunfo y tres puntos que le permitieron escalar a cima de la Zona 6 de la Copa Diego Maradona.

Antes del partido, se realizaron los homenajes correspondientes que se harán en cada cancha del fútbol nacional, pero la delegación del Lobo tuvo su reconocimientos propios. 

Remeras negras para jugar el partido y globos blancos que fueron largados al cielo luego del aplauso fueron los grupales. Además, Fatura Broun, arquero que trajo el Diez al club se tiñó el mechón amarillo que el Pelusa uso en su última época como jugador de Boca y los técnicos interinos, Martini y Messera, salieron a la cancha con una remera azul que portaba el apellido y número clásico del ex DT.

Pero adentro de la cancha, también cumplieron con el homenaje. El Lobo salió a dar la cara y lo hizo de la mejor manera en el primer tiempo, con ideas futbolísticas que pasaron por los pies de José Paradela (la figura) y Matías García y con orden en la mitad de la cancha con los roles de Harrison Mancilla y Víctor Ayala.

Así, los "muchachos" de Dios, fueron superando a Vélez y a los 22 minutos, llegó el único tanto del partido. Ayala ejecutó un centro a la perfección y en el segundo palo pareció, en soledad, Maxi Coronel, para marcar el gol especial que fue dedicado por el ex River mirando e indicando el cielo.

En el complemento, el local comenzó a crecer, pero la fortaleza como equipo de los Triperos fue clave. Aguantaron el resultado marcando, corriendo y sacando todos los centros que caían en el área de Mens Sana.

Antes de que terminé el partido, Erik Ramírez y Paradela tuvieron una doble chance de ampliar el marcador y luego pudo darse también con un remate de Braian Aleman, pero el juvenil arquero de Vélez, Matías Borgogno lo impidió.

El pitazo de Néstor Pitana marcando el final, hizo explotar de alegría a los jugadores que consiguieron tres puntos de oro, que le permitió regalarle un triunfo a Diego, pero también a escalar a la cima igualando la línea de su rival de turno con 8 puntos.

La adversidad anímica no bajoneó al Lobo, al contrario, lo levantó y aulló más fuerte.