Los clubes deben estar en manos de sus socios
Por Nicolás Russo
Lo mejor que nos podía pasar era que arranque el fútbol. Nunca hay un ciento por ciento de conformidad entre todos los dirigentes. Los que estamos adentro sabemos que es muy difícil salir de la crisis de un día para el otro. Pero con la pelota en juego, muchos problemas se van a ir resolviendo sobre la marcha.
Durante muchos años, la AFA se manejó con una gran desprolijidad y por eso ahora tiene serios problemas económicos. El 38-38 de las elecciones en diciembre surgió de un error. Que se haya demorado tanto para regularizar el fútbol fue culpa exclusivamente de los dirigentes. Hubiese preferido que haya elecciones y una nueva conducción elegida por los clubes. También reconozco que los estatutos de AFA no están actualizados a lo que requiere el fútbol mundial. Esta situación debería normalizarse lo más pronto posible. Me conformaría si se logra antes del 30 de junio de 2017.
En su momento, Grondona era la barrera que teníamos para frenar a los espacios políticos que querían meterse en el fútbol. Manejar la AFA tiene más trascendencia que ser gobernador de alguna de las provincias del interior. La realidad es que ahora está intervenida y el Comité Ejecutivo no existe más. Hace varios meses anticipé que esto iba a pasar. De todos modos, desde el Club Lanús ofrecemos la mejor predisposición para colaborar con la Comisión Normalizadora y lo apoyamos a Armando Pérez. Si le va mal a él, nos va mal a todos. Estoy para sumar.
El acuerdo para que comience el fútbol fue muy complejo de llegar, pero con una buena actuación de la Comisión Normalizadora se logró. Había una diferencia de $ 350 millones que le correspondía al ascenso; parte de esa plata la va a poner Fútbol para Todos y otra parte un fondo solidario de los clubes de Primera. Todos tenemos muchos inconvenientes para afrontar tantos gastos. Pagamos IVA y los operativos aumentaron un 100%, pero debemos ayudar en conjunto para sacar esto adelante.
Yo siento que hay que reformular los campeonatos. El de Primera División debe tener 20 equipos, con dos ascensos y dos promociones. Y el Nacional B podría tener 40, haciendo dos torneos de 20 y partiendo el país a la mitad. Después tendría que haber diez regiones con un torneo federal, compuesto por 20 equipos cada zona a distancias cortas, que sean amateurs. Los dos primeros de cada grupo, por eliminatoria, deben enfrentarse para ver quiénes ascienden.
Por otro lado, en Lanús estamos en contra de los gerenciamientos y las Sociedades Anónimas. Muchos clubes argentinos, ante su necesidad económica, se verán tentados en aceptar. Pero fundirlos y presionarlos no es el camino. En Europa se entregan y arreglan partidos con este formato porque una persona es dueña de varias instituciones. Además, las S.A. pueden ser utilizadas para lavado de dinero. Por eso sostenemos a ultranza que los clubes deben estar en manos de sus socios.