¿Por qué parece que Argentina "está generalmente endeudada"?
Las intenciones de control de las potencias dominantes y los mercados en Latinoamérica, y las combinaciones con los gobiernos locales de derecha
La deuda pública de los estados ha sido históricamente una herramienta que nada tiene que ver con el desarrollo y crecimiento del país que toma esa deuda, sino con la intención de factores de poder internacional de limitar los márgenes de maniobra de los gobiernos, en especial de los que eventualmente suceden a quienes tomaron la deuda. La salida a los mercados a colocar deuda pública es realizada casi con exclusividad por parte de gobiernos que están alineados con las políticas que tratan de imponer las potencias dominantes internacionales y en especial las fuerzas representantes del sector financiero de esos países.
La región Latinoamericana ha demostrado sobradamente, en especial en las últimas cinco décadas, las consecuencias del endeudamiento público limitante e impuesto por fuerzas geopolíticas externas con complicidad de las oligarquías locales al servicio de esas fuerzas, tanto en tiempos de democracia como especialmente durante las dictaduras. La Argentina ha sufrido las consecuencias de esta práctica desde el momento mismo de su independencia y el reciente caso del gobierno de Mauricio Macri, entre 2016 y 2018, no solo es paradigmático sino que parece marcar un récord en cuanto a su profundidad, tiempo y consecuencias.
El primer evento de endeudamiento relevante de Argentina ocurre en 1822 y ya dejaría sentadas las bases del rol de ésta en la historia futura, ya que de los 2,8 millones de libras esterlinas que se piden a la banca Baring Brothers para construir el puerto de Buenos Aires y la supuesta inversión en la fundación de varias ciudades en la naciente República. Sin embargo, de esa suma solo 570 mil libras llegan a Argentina y durante décadas se pagan intereses y capital que se terminan de saldar 8 décadas después por una suma total de 23,7 millones de libras.
Casi dos siglos después, a fines del 2015, al asumir la coalición de derecha liderada por Mauricio Macri, el nivel de endeudamiento estatal en dólares era extremadamente bajo para la región e incluso el mundo, menos del 10 % neto respecto del PBI según el propio Nicolás Dujovne, Ministro de economía de Mauricio Macri. Y en tan solo dos años, las autoridades económicas de Mauricio Macri organizaron un festival de emisión de bonos de deuda tan salvaje que no solo llevó a agotar el crédito internacional a principios de 2018 y llegar a casi un 100% del PBI de endeudamiento estatal, sino que además hizo inviable el pago de los vencimientos ya en el año 2018 y obligó al gobierno a recurrir a un préstamo extraordinario del FMI de 50 mil millones de dólares, récord histórico para ese organismo a nivel mundial, un "aporte de campaña" que -es sabido- impulsó Donald Trump para apuntalar un gobierno de derecha en el 3er país latinoamericano de mayor relevancia económica y que afortunadamente resultó insuficiente para que Macri lograra su reelección presidencial.
El endeudamiento y posterior crisis de deuda latinoamericana de las décadas del 70 y 80 sentó las bases para imponer en esta región el consenso de Washington con su festival de desregulaciones, privatizaciones y reformas para desmantelar el estado de bienestar y las capacidades de planificación y regulación estatales, las fuerzas sociales y políticas de la región deberán estar alerta para que una nueva etapa de preparación de ajustes y alineamientos forzados no pueda tener cabida en el siglo XXI.
* Economista y Profesor de Macroeconomía de la UNLP. (Ex asesor Presidencias de BCRA, UIF y BNA). Twitter: @juanvalerdieco