Para la mayoría de las personas, conducir es una actividad que no conlleva demasiadas dificultades. Sin embargo, hacerlo durante los días lluviosos puede resultar algo complejo: según los expertos, en épocas de precipitaciones los accidentes viales suelen incrementarse entre un 15% y un 20%. Esto se debe a la superficie resbalosa del asfalto producto de la mezcla del agua con residuos como el aceite y el combustible, así como a problemas de visibilidad provocados por la lluvia. A continuación, se presentarán algunos consejos para poder prevenir accidentes viales:

Estar atento al espejo central

Uno de los principales factores que se deben considerar durante los días de lluvia, es la limitación de la visibilidad. En este sentido, es muy probable que los retrovisores se mojen, por lo que será necesario potenciar el uso del espejo central. Además, es importante estar atento a los autos que estén detrás nuestro para evitar hacer maniobras que perjudiquen a los demás conductores.

Controlar la velocidad 

Al momento de conducir en un día lluvioso, es fundamental respetar los límites de velocidad establecidos para estos casos específicos. Lo más común, especialmente para autopistas y rutas, es que sea la mitad de la velocidad máxima prescrita. Es fundamental respetar esta norma, ya que, de no hacerlo, es posible perder el control del vehículo y ocasionar un accidente. Para saber más sobre prevención de accidentes, se puede buscar información en Internet o en el sitio oficial de tu empresa de seguros de automóvil.

No hacer maniobras sin aviso

Si estamos en días tormentosos debemos prestar el doble de atención a lo que sucede en las calles o rutas. Es vital evitar cualquier decisión brusca que pueda comprometer a otros conductores; no se debe frenar de forma violenta ni cambiar de carril sin señalizarlo previamente, entre otras cosas.

Evitar las huellas de hundimiento

En el caso de que se esté conduciendo por calles de tierra o por terrenos irregulares, lo mejor será buscar la zona más llana y no seguir los caminos ya transitados, ya que esto mantendrá al vehículo con mayor estabilidad. A muchas personas les surge la idea de seguir el recorrido de las huellas de autos que pasaron anteriormente, lo que puede ser una maniobra poco inteligente que provoque el el vehículo se hunda.

No desesperarse ante el deslizamiento

En las zonas de charcos es común que el auto se deslice y provoque la sensación de que está flotando. En estas situaciones, la clave es no desesperarse y soltar el acelerador hasta que el auto vuelva a tener control de dirección.

Si bien para muchas personas conducir bajo la lluvia puede ser algo difícil de aprender, sólo es cuestión de estar atentos y tener en cuenta estas reglas básicas para disfrutar de un viaje tranquilo y sin inconvenientes.