En medio de intensas negociaciones entre el Frente de Todos y Juntos para sancionar la Ley de Presupuesto 2023 para la provincia de Buenos Aires antes de fin de año, organizaciones sindicales y políticas movilizaron a la Legislatura para rechazar la iniciativa. Los manifestantes cortaron la calle, prendieron cubiertas y un grupo arrojó piedras contra las ventanas de la Cámara de Diputados. 

Después de varias semanas de tires y aflojes entre oficialismo y oposición por los montos destinados a los municipios y el mecanismo de reparto de esos recursos, ambas Cámaras tenían dispuesto sesionar este jueves para aprobar el proyecto. La Cámara de Diputados comenzaría a debatir a las 11 de la mañana, mientras que el Senado lo iba a hacer desde las 14 horas. 

Sin embargo, diferencias de último momento entre Juntos y el Frente de Todos hicieron que ninguna de las Cámaras comenzara a sesionar. Mientras tanto, por si las disputas y la rosca a contrarreloj no eran suficientes, afuera también se tensionaba el ambiente. 

Sindicatos y organizaciones habían convocado a una movilización a las puertas de la Legislatura para rechazar el Presupuesto 2023 al que describieron como “un presupuesto de ajuste”. La mayoría de los manifestantes realizaban la protesta en paz sobre calle 7, sin embargo, otro grupo se trasladó hacia calle 8 donde se produjeron incidentes y algunos hechos de violencia. 

Allí, quienes llevaban a cabo la protesta prendieron fuego gomas y maderas, y arrojaron piedrazos hacia las ventanas de la Cámara de Diputados. 

Tweet de Sindicato de Trabajadores Municipales d San Isidro

Además, un grupo de trabajadores municipales nucleados en el FESIMUBO intentaron derribar las rejas y advirtieron que no se irían del lugar hasta tanto no les den una respuesta al pedido de modificar un artículo de la ley 14.656 que habla de las asignaciones familiares para los empleados de las comunas. 

En la ley de presupuesto se modificó el artículo que habla sobre las asignaciones familiares y dejó al criterio de los intendentes el pago de la asignación, "sin tomar el monto que establece la ANSES a nivel nacional”,  advirtió el secretario de Organización de FeSiMuBo, Víctor González.

“Se habilitó a los intendentes a pagar asignaciones familiares inferiores para los trabajadores municipales, como si nuestros hijos valieran menos que los del resto. No solo nos pagan salarios de miseria sino que nos quieren someter a esta nueva vulneración, nuestros hijos no valen menos“, exclamó el intendente en diálogo con Todo Provincial. 

Por otro lado, organizaciones de izquierda también rechazan el Presupuesto 2023 por considerarlo un "pacto de ajuste" entre el oficialismo y la oposición. El diputado provincial del Partido Obrero, Guillermo Kane, denunció que “la parte del presupuesto dedicada a educación se viene reduciendo año a año”. 

El legislador sostuvo que lo mismo sucede en Salud. “Acá no solo faltan insumos y hay malas condiciones edilicias, sino que los sueldos para profesionales son tan bajos que muchísimos cargos quedan sin cubrirse. Este presupuesto agrava esta situación, vaciando el sistema público”, señaló.

Así las cosas, entre la falta de acuerdos adentro de la Legislatura y la protesta afuera, la sanción del Presupuesto 2023 vuelve a peligrar y crece la preocupación en el gobierno de Axel Kicillof que quiere terminar el año con la Ley de leyes aprobada.