La crisis de empleo golpea fuerte en Chascomús. Esta semana la fábrica EMEPA, que se dedica a la reparación y mantenimiento de material ferroviario, anunció el despido de 80 trabajadores por una “reestructuración” reducirá la planta al 50% de su capacidad. La metalúrgica se sumó así a una larga lista de empresas radicadas en la ciudad que redujeron personal en el último tiempo entre las que se encuentran la tecnológica “Unitec Blue”, aguas Danone y la textil Texes S.A (ex Masis).

En EMEPA, los empresarios tomaron la drástica decisión de reducir el personal a la mitad por “falta de trabajo” luego de que no se renovara un contrato con el Ministerio de Transporte de la Nación para la reparación de vagones. El conflicto en la metalúrgica empezó a vislumbrarse a fines de 2017 cuando la empresa les dio a los trabajadores vacaciones adelantadas. Después de aquella situación, surgió una licitación para la compra de diez vagones que le dio algo de respiro a la planta hasta estos días.

Esta mañana, delegados de la Unión Obrera Metalúrgica se reunieron con autoridades del Ministerio de Trabajo para intentar que se reduzca el número de despidos y acordar el pago de indemnizaciones.

La fábrica de chips y tarjetas Unitec Blue, del empresario Eduardo Eurnekian, también redujo su personal a la mitad. A principios de 2018, la empresa logró arreglar 15 “retiros voluntarios”, que se sumaron a otros 12 despidos. Y en abril, presentó ante el Ministerio de Trabajo un “estado preventivo de crisis” con el cual desvinculó a otros 35 empleados metalúrgicos (la mitad de los 70 que trabajaban en ese momento). En total se desvinculó a 62 empleados.

Uno de los trabajadores despedidos le explicó en ese momento a Diagonales que "hace un par de meses que el laburo viene muy flojo. Lo poco que hacíamos era producir tarjetas telefónicas y en el momento en que abrieron las importaciones, decidieron comprarlas en China y solamente, cambiar las etiquetas en la fábrica".

También la planta de agua Villa Del Sur (de la empresa Danone) que está ubicada sobre la ruta 2 a la altura de Chascomús despidió en marzo a 4 trabajadores de planta y puso en lista a otros 30. Esta semana se conoció que a los 200 empleados que trabajan hoy en el lugar se los obligará a tomar vacaciones de una semana en los meses de junio y julio. Me medida, que podría extenderse hasta agosto, busca ahorrar energía por las abultadas sumas de dinero del servicio de luz.

La crisis de empleo en la ciudad de gobierna el massista Javier Gastón no comenzó en 2018. El año pasado, la textil Texes S.A (ex Masis) debió cerrar sus puertas y dejó a en la calle a 130 trabajadores.