Desde hace unos días, el intendente de Moreno, Walter Festa, viene realizando un pedido desesperado a la gobernadora María Eugenia Vidal y a los funcionarios de la administración provincial para ser atendido y resolver los problemas económicos que atraviesa su municipio. Desde el Gobierno nacional intervinieron y criticaron los gastos excesivos.

El Gobierno cruzó al intendente kirchnerista que había acusado de "insensible" al Ejecutivo provincial encabezado por Vidal por no otorgarle una ayuda financiera para pagar sueldos, cosa que sí ocurrió en otros municipios. En este contexto es que lo acusaron de haber contratado a "500 militantes" que le cuestan unos "12 millones de pesos" al mes al Tesoro municipal. 

Allegados al Intendente desmienten estos dichos y aseguran que la planta de empleados públicos asciende a 4.905, "apenas por encima" de la recibida en diciembre de 2015.

Desde hace meses que Walter Festa tiene un duro enfrentamiento con el gobierno de Cambiemos. Sin embargo, ayer logró ser recibido por las autoridades del ministerio de Economía provincial. Si bien no fue recibido por el ministro Hernán Lacunza, si pudo encontrarse con el subsecretario de Política y Coordinación Económica, Damián Bonari, que se comprometió a estudiar la situación de la comuna, y les plantearon que necesitan $ 400 millones para poder afrontar los gastos hasta fin de año.

"Apenas asumió en Moreno contrató 500 militantes, la mayoría de ellos vinculados a La Cámpora. Y teniendo en cuenta el salario medio de la comuna, para hacer frente a esos pagos requiere $ 150 millones por año, unos $ 12 millones por mes", acusaron a Festa desde Cambiemos. 

La campaña electoral se enciende y el jefe comunal fuertemente vinculado a Cristina Kirchner enfrenta las legislativas con serias dificultades.