El escenario fue complejo, nadie lo dudó. Pero lejos del colapso y la abrumadora realidad que impactó en gran parte del mundo, la comuna tigrense se aferró impetuosamente a la frase de la célebre eminencia en materia de salud, René Gerónimo Favaloro, para alcanzar un R0 de 1.01: “Proceder con honestidad en aras de la dignidad del hombre es el compromiso más trascendente en nuestro corto paso por este mundo".

La necesidad de conjugar los esfuerzos al servicio de una comunidad frente a una pandemia que sacudió al mundo entero – y que aún sigue al acecho – fue un eslabón imprescindible. Luego de varios meses de un laborioso trabajo de todas las y los actores que conforman la política local y, por supuesto con el apoyo de Nación y Provincia, se logró alcanzar un indicador R0, el modelo matemático para calcular el promedio de personas que se contagian a partir de una infectada, ha llegado a 1.01, y permanece en descenso.

En tiempos de pandemia, en donde muchos sectores pretendieron establecer una doctrina necia entre la salud y la economía como dos equipos de fútbol que compiten entre sí, los resultados manifiestan que el desempeño colectivo, la colaboración, la responsabilidad de vecinos y vecinas y las políticas públicas fueron herramientas elementales para alcanzar un objetivo esencial, preservar la vida.

En ese contexto - desde la emergencia sanitaria en el país declarada en el mes de marzo por el Gobierno Nacional - la gestión acertada en tiempo y forma del intendente Julio Zamora en la readecuación de la estructura sanitaria municipal, impulsó una serie de medidas que permitieron atacar de forma efectiva la segunda pandemia más profunda en lo que va de este siglo, luego de la primera en 2009 a causa de la gripe A (H1N1).

Al decretarse el Aislamiento, Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) el equipo de gestión del área de Salud municipal planificó una estrategia basada en la solidez del primer nivel de atención con dos etapas discriminadas en: etapa de contención, con la cual fortaleció la demanda espontánea del Sistema de Emergencia Tigre (SET), vigilancia epidemiológica, recepción de denuncias de casos sospechosos y apoyo psicológico, entre otros. Y etapa ampliada: con controles en los veintidós Centros de Salud del distrito que incluyeron vacunación, la readecuación de los Polideportivos como espacios de atención y el seguimiento telefónico permanente de los casos positivos de COVID-19.

Asimismo, en la era de las comunicaciones digitales, las redes sociales permitieron tener un alcance más rápido y eficaz dentro de la comunidad para lograr acercar recomendaciones necesarias para prevenir el contagio; como también la articulación permanente con entidades comunitarias para promover las prácticas del autocuidado.

Algunas de las medidas, que representaron una significativa inversión por parte del Municipio, se vieron reflejadas en el fortalecimiento del sistema sanitario con nuevos equipos en los Hospitales de Diagnóstico Inmediato (HDI) de Tigre centro, Don Torcuato y Benavídez; la creación del Centro de Aislamiento en Troncos del Talar, el nuevo sistema de Telemedicina que optimizó la asistencia y permitió realizar un seguimiento a distancia de casos sospechosos de COVID-19 y atender inquietudes de pacientes con patologías leves, enfermedades crónicas, adicciones y salud mental, entre otros; nuevos móviles, como también los diversos operativos en barrios y el trabajo en los centros de salud y hospitales locales, que permitieron testear a 42.500 vecinos y vecinas.

Este trabajo efectuado al calor de un recurso humano comprometido por cuidar la salud de cada habitante del distrito, fue un elemento trascendental para alcanzar el indicador R0 de 1.01 en la población de Tigre que, lejos de relajarse, continúa con un alto nivel de responsabilidad en aplicar los protocolos sanitarios adecuados para el autocuidado.

 En las últimas semanas, Tigre se convirtió en el primer municipio de la Argentina en adquirir los primeros 2.000 test rápidos de diagnóstico de antígenos SACARCov-2 para detectar el virus. Se trata de un dispositivo que fue presentado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Ginebra y Suiza que permite identificar en solo 15 minutos el COVID-19, con una sensibilidad del 94% y especificidad del 98%.

Poner el acento en el rol de un Estado municipal involucrado como articulador de políticas públicas que cuiden la salud de una comunidad, pone en manifiesto que cuando se quiere trabajar con seriedad y compromiso - como Tigre lo ha hecho a lo largo de estos meses - los resultados terminan siendo prósperos.

El corazón, la responsabilidad y también las pérdidas que este virus nos ha dejado como secuela en el camino, emergieron la creciente necesidad de construir herramientas y acciones políticas para resguardar a la comunidad. La vacuna nos vislumbra una brillante luz de esperanza en el horizonte. Pero, hasta entonces, debemos seguir cuidando a nuestra salud, cuidarnos los unos a los otros con las tres medidas más eficaces para combatir el virus: uso del tapabocas, el distanciamiento social y el frecuente lavado de manos.

La batalla se ganará con el esfuerzo de todos y todas y más temprano que tarde dejaremos atrás esta pesadilla llamada coronavirus.


 *Secretario de Salud del Municipio de Tigre. Twitter: @Salud_Tigre