El intendente de Pinamar, Martín Yeza, tuvo que salir a defenderse de las críticas a partir del operativo de seguridad dispuesto para la noche de Año Nuevo en las inmediaciones de las playas más céntricas. El mensaje dirigido a los "liberales". 

El operativo tenía por objeto evitar peleas y disturbios, sin embargo, usuarios de Twitter difundieron fotos de un gran cordón policial que el municipio montó en la zona de Bunge y Avenida del Mar, e hicieron alusiones a un operativo "desmedido" y que "condicionaba la libertad de los ciudadanos".

Yeza eligió no quedarse callado y realizó su descargo mediante Twitter: "desde anoche circulan estas imágenes sobre el operativo de control en Pinamar. El operativo de control se implementa desde hace dos años para evitar las batallas campales y este año, además, para evitar grandes aglomeraciones de gente debido a la pandemia", planteó el jefe comunal. 

Y remarcó que "hace un año en Navidad ocurrió esta batalla campal, algo que ya venía ocurriendo en las últimas festividades" y que "en la mayoría de los casos se trata de menores, a quienes sus padres dejan salir y alcoholizarse".

"Sería un mal intendente si dijera que no sabía que cerca de 50.000 personas se juntan en Bunge y Av. del Mar en Año Nuevo y se matan a trompadas. Es lo que ocurre. Entiendo que a muchos no les gusta la realidad y es por eso que algunos trabajamos para administrarla y transformarla", señaló en su cadena de tuits.

Además señaló: "¿El resultado de nuestras medidas cuál fue? 1) No hubo vandalización del patrimonio público. 2) No hubo batalla campal en esta zona de gran afluencia. Entiendo que nos acostumbramos a interpretar fotos, algo que le ha hecho mal a la política. Los invito a evaluar resultados". 

El intendente concluyó con un mensaje dirigido a los "liberales": "Nunca me hubiera imaginado que se iban a animar a ideologizar el orden. Han confundido sus posturas sobre el coronavirus con una situación preexistente que ya ocurría en Pinamar".