En la ola contra el nepotismo que comenzó con la oficialización del decreto firmado Mauricio Macri -que establece que familiares con “segundo grado de consanguineidad” (padres, suegros, hijos, yerno/nuera, abuelos, hermanos, cuñados y nietos) no podrán ocupar cargos en el gobierno- comenzó a mostrar sus falencias en el interior de la provincia de Buenos Aires.

El caso más resonante fue el del intendente oficialista, Ezequiel Galli, quien colocó en Olavarría a una larga lista de familiares directos a ocupar cargos en el gobierno. Para sorpresa de propios y ajenos, Galli anunció ayer que se sumará a la medida que impulsa Cambiemos.

El decreto contra el nepotismo que dictará el jefe comunal tendrá el mismo contenido que el firmado por Macri y alcanzará solamente a su esposa, Florencia Barbieri -quien es auditora de PAMI- y a su suegro Omar Barbieri, asesor del municipio. Según lo puntualizado por el intendente, su esposa ya “renunció a su cargo por razones familiares. Se va a dedicar solamente a su consultorio privado”.

Otro que podría dejar el cargo es el ex concejal y ahora subsecretario Legal y Técnico, Luciano Blanco, quien es el esposo de la Secretaria de Salud del distrito, Mariana Diamanti

Los otros familiares de Galli y de otros funcionarios del gabinete que no dejarán su puesto son nada más y nada menos que diez. Su tío Eduardo Galli, que en 2016 era subsecretario de Deportes y Turismo del municipio y ahora es “asesor”; sus primos Juan Agustín Galli, director de Gestión Deportiva; Hilario Galli, subsecretario de Recursos Públicos; Viviana Sneider, que tiene a cargo la Dirección de Enfermería (y su esposo es subdirector de Bromatología); y Mariana Galli, quien es directora de psicología del hospital municipal (y su esposo es el encargado del depósito del mismo centro de salud).Según consignó La Política Online, la titular del  área de Bromatología es la prima de la esposa de Galli, Paola Milessi.

Además el ex secretario de Hacienda, Gastón Acosta, puso a su esposa Guadalupe Araujo como subsecretaria de Relaciones Internacionales; y a su hermana Lucrecia Acosta como directora de Casa de Olavarria en la ciudad de Buenos Aires.