A cuatro meses de las PASO, en Mar del Plata se lanzaron varios precandidatos a intendente, aunque aún resta saber cuántos de ellos llegarán efectivamente a presentarse el 11 de agosto y por qué fuerza lo harán. Dentro de Cambiemos hay cinco nombres que pugnan por ser el próximo intendente de General Pueyrredon. En la oposición, lo que suceda con el Peronismo a nivel nacional afectará los destinos de, al menos, tres candidatos que disputan esa representación.

El 22 de junio vence el plazo para la presentación de las listas de precandidatos para las PASO ante la Junta Electoral Partidaria. Para los tiempos de la política aún falta mucho y hasta esa fecha puede suceder casi cualquier cosa. No sólo está en disputa la candidatura a intendente, sino también los puestos en las listas de concejales y legisladores,  lo que revoluciona a todas las fuerzas partidarias.

Cambiemos

El primero que lanzó su candidatura fue el Intendente Carlos Arroyo: desde el año pasado insiste en que irá por la reelección porque afirma que necesita cuatro años más para terminar con los desafíos de su gestión. Si bien la imagen del jefe comunal ha caído notablemente desde su asunción en 2015, quienes lo acompañan creen que sigue siendo el mejor candidato de Cambiemos y que el plan de obras 2019 influirá positivamente en el electorado. Sin embargo, la mala relación con el gobierno provincial puede cortar sus aspiraciones; Arroyo crea conflictos innecesarios y en más de una oportunidad la provincia debió interceder para resolverlos, argumentan desde La Plata. 

Dentro de la Unión Cívica Radical hay dos candidatos que ya comenzaron a pegar afiches en la ciudad. Por una lado está la concejal Vilma Baragiola, quien encabezó la lista ganadora de Cambiemos en 2017. Baragiola ya realizó varias campañas a intendente y cuenta con muchos años en la política local: integró el Concejo Deliberante en cuatro oportunidades y además fue diputada nacional. Junto a Carlos Arroyo y al ex jefe comunal, Gustavo Pulti, es una de las figuras políticas con mayor nivel de conocimiento en Mar del Plata. A pesar de haber sido secretaria de Desarrollo Social de esta gestión, Baragiola afirma que con  Arroyo tienen concepciones diferentes de la política y eso se ve reflejado en el modo de administrar. Bajo el lema “la candidata de la gente”, Vilma, como todos la conocen y aparece en los carteles, apunta a representar a Cambiemos en las próximas elecciones, aunque no tenga una óptima relación con la gobernadora María Eugenia Vidal. A pesar de ello, desde el entorno de Baragiola sostienen que no es importante cuán cercana pueda ser de la gobernadora, sino que lo importante es la pertenencia a un mismo espacio político. 

El otro candidato radical es Maximiliano Abad, actual jefe de bloque de Cambiemos en la Cámara de Diputados provincial. Abad encabezó la lista de legisladores de la quinta sección electoral en 2015 y siempre se mostró cercano a la gobernadora. Hace pocas semanas lanzó en Mar del Plata una novedosa campaña en la que sólo aparecía el hashtag #ImagináElFuturo y un código QR para escanear. Al ingresar con el celular se desplegaba la imagen de Abad junto a Vidal. Con una fuerte presencia en redes, Abad apuesta a resaltar el tema generacional y se presenta como el jefe del bloque de los diputados de la gobernadora.

A pesar de contar con dos candidatos, desde la UCR confían en que se logrará un acuerdo entre estas dos propuestas en pos de la unidad radical a la hora de presentarse a las PASO en agosto. Aseguran que no es momento para dividir y generar fuga de votos.

En el Pro, el único candidato que salió a la cancha es el diputado nacional Guillermo Montenegro, quien si bien nació en Mar del Plata, nunca desarrolló su actividad política en esta ciudad. Más allá de ello, desde hace varios meses recorre los barrios y lanzó una campaña gráfica junto a María Eugenia Vidal. Sin embargo, su nivel de conocimiento sigue siendo bajo y algunos de sus contrincantes dentro de Cambiemos sostienen que este hecho va a ser fundamental para que finalmente desista de presentarse. Montenegro suele aparecer como anfitrión cada vez que un funcionario llega a la feliz pero su nulo recorrido político en la ciudad puede ser un obstáculo demasiado grande. Cabe destacar que en 2015 fue candidato a Intendente de San Isidro y un año más tarde sostuvo que su objetivo era volver a presentarse en 2019, ya que la intendencia de esa localidad era su sueño y ese era el lugar donde quería estar. Instalar un candidato no se hace de un día para el otro y el desafío de Montenegro es hacerse conocido para el electorado marplatense en poco tiempo. 

A esta lista también se puede sumar el diputado provincial de la Coalición Cívica Guillermo Castello, quien suele criticar con dureza la gestión del intendente Arroyo y aseguró, en más de una oportunidad, que la CC debería presentar candidatos propios. En los últimos meses Castello ganó mayor difusión por su postura a favor de UBER, un apoyo que lo convirtió en el principal receptor de las críticas de cientos de taxistas que se movilizaron por la ciudad.

Finalmente, hay una fracción del Pro que aún no ha expresado su voluntad. En Mar del Plata el referente del macrismo es el diputado nacional Juan Aicega, quien tiene llegada directa al presidente. Si bien desde este sector no han presentado candidato propio y aún no definieron ningún apoyo explícito, sostienen que hasta ahora todas las candidaturas son positivas y que acompañarán la mejor propuesta para Cambiemos, es decir, la que tenga mayor aceptación del electorado para fortalecer candidaturas a nivel provincial y nacional. En esta misma línea el senador provincial Franco Bagnato tampoco participa activamente de la discusión de candidaturas, aunque su pasado en radio y televisión le suman reconocimiento en la población.

El mapa del Peronismo-Kirchnerismo

Si el panorama en el oficialismo aún está poco claro, en la oposición también queda mucho por resolver. 

En Alternativa Federal el único candidato, por ahora, es Ariel Ciano, quien fuera secretario de Gobierno y concejal de Acción Marplatense en la gestión de Gustavo Pulti. Luego de su alejamiento del pultismo ingresó al Concejo Deliberante encabezando la lista de Un País. Desde este sector afirman que se está convocando a todos los que creen que se puede construir una ciudad distinta, aunque saben que el destino de las PASO dependerá de lo que sucede con la unidad o no a nivel nacional. 

Uno de los que podría sumarse a la contienda en el peronismo es Gustavo Pulti, quien lanzó su candidatura a través de un video publicado en redes sociales el pasado 9 de abril. “Quiero que mi experiencia sea útil para levantar y recuperar Mar del Plata” sostiene Pulti, quien gobernó la ciudad entre 2007 y 2015. Si bien llegó al poder con su partido vecinalista Acción Marplatense, desde 2009 estrechó sus vínculos electorales con el Frente para la Victoria y en las elecciones de 2015 integró el Frente Marplatense, que perdería frente a Cambiemos. Luego de la derrota con Arroyo, Acción Marplatense volvió a la lista corta en 2017 haciendo una autocrítica y volviendo a sus raíces; sin embargo ese año no logró ingresar un solo concejal. En una elección que tiende a nacionalizarse, el pultismo seguramente intentará acercarse al massismo o al kirchnerismo ya que de lo contrario podría tener dificultades si se presenta exclusivamente desde su espacio vecinal.

El mismo día en que Pulti lanzaba el video anunciando su postulación, la diputada nacional Fernanda Raverta subía a sus redes una foto junto a Cristina Fernández de Kirchner en el Instituto Patria. Desde hace tres años Raverta es la referente del kirchnerismo en la ciudad, si bien nunca se presentó para un cargo local, ya fue diputada provincial y nacional. Los seis concejales de Unidad Ciudadana responden a ella y ya cosechó el apoyo de diversos sectores kirchneristas y peronistas locales. Es la anfitriona cada vez que arriba una figura política nacional y en las últimas semanas sus afiches se pueden ver en las calles de Mar del Plata. A pesar de su actividad en el Congreso de la Nación, desde hace varios años Raverta vuelve a su ciudad todas las semanas para mantener varias reuniones y realizar recorridas en los barrios.

A diferencia de Cambiemos, estos espacios tienen prácticamente todo definido a nivel local. Sin embargo, la política nacional y los acuerdos aún pueden cambiar el panorama.

Falta mucho para el 22 de junio, el momento en que se develarán muchas de las incógnitas: de todos estos nombres ¿cuántos se enfrentarán en las PASO? ¿Aparecerán los tapados? ¿Habilitarán internas o se decidirá que haya una lista única? ¿Habrá nuevos acuerdos? ¿Algunos candidatos finalmente se presentarán para otros cargos? Por ahora sobran especulaciones y algunas operaciones, el tiempo y la política definirán los destinos de estos candidatos.