La problemática de los perros callejeros, que puso en agenda el intendente Saavedra cuando afirmó que un jefe comunal de un distrito vecino le tira los perros en Pigüé, también causa dolores de cabeza a los radicales en Tandil. Es que según estimaciones extraoficiales, habría 35 mil caninos sin dueño en la ciudad.

Desde el área de Bromatología del municipio, Federico Sánchez Chopa, descree la cifra, pero afirmó que están trabajando junto a la Facultad de Veterinaria para construir un método que permita “censar” a los animales.

“El plan integral que estamos desarrollando es grande y lleva tiempo”, afirmó el funcionario del municipio que encabeza Miguel Lunghi al diario local “El Eco” y planteó que una vez que se cuente con un número más aproximado se podrá proceder a controlar la situación y lograr mayor eficiencia en cuanto a las castraciones, ya que la intención es superar las 5 mil operaciones anuales que se registran actualmente.

Otro de los proyectos más ambiciosos apunta a trasladar el predio de los caniles que funciona actualmente. La intención es moverlo un área lindante a un viejo predio destinado en su momento a relleno sanitario. Mientras que parte de la zona que habría contenido desechos serviría como extensión para actividades recreativas de los animales. El concepto es ampliar la capacidad de contención de canes y mejorar la calidad de caniles a los que hay actualmente disponibles.

La mudanza significaría a la comuna el desembolso de casi 3 millones de pesos, pero como no estaba proyectado dentro del presupuesto 2018 para Tandil las autoridades municipales deberán buscan financiamiento en Provincia o Nación.