La ilusión de Cambiemos de ganar la intendencia de San Martín viene en descenso desde el alentador resultado de las elecciones 2017. Es que el candidato que busca imponer María Eugenia Vidal no tiene peso propio y depende de la estructura del histórico del clan Ivoskus. En tanto, el intendente Gabriel Katopodis irá por la re-elección dentro del peronismo, donde podría tener que someterse a una interna si es que decide jugar dentro del armado kirchnerista.

En ese escenario, dos figuras que hasta hace poco se mostraban distanciadas volvieron a verse las caras y hasta se deshicieron en elogios. Es que Katopodis abrió las puertas del espacio municipal “Casa Carnacini” para que el diputado provincial Daniel Ivoskus inaugure la muestra de “El arte de la Comunicación Política”.

Con la exposición de fondo, se hicieron presentes en Villa Ballester los ex intendentes Ricardo Ivoskus y Carlos “Tato” Brown. Este último supo jugar en Cambiemos en la última elección, pero ahora se muestra cercano al senador Miguel Ángel Pichetto. También estuvo el favorito de Vidal, Santiago López Medrano que hizo de “testigo mudo” del evento.

Tanto Ivoskus como Katopodis destacaron la “madurez política” en el distrito y la voluntad de trabajar “en cosas que le sirven a San Martín”, aunque dejaron en claro que no habrá una alianza en el plano electoral. “Si nos podemos sentar en una mesa a hacer cosas juntos, esos son acuerdos políticos”, planteó ante la prensa el diputado de Cambiemos.

Por su parte el intendente deslizó que “con Daniel (Ivoskus) conversamos más de lo que la gente sabe” y planteó: “Vamos a demostrar que se puede competir electoralmente sin que eso sea incompatible con compartir proyectos locales con miradas estratégicas de mediano y largo plazo”.

Con miras a 2019, Katopodis se muestra decidido a ir por un tercer mandato. Si bien en la última elección –cuando jugó con la boleta de Florencio Randazzo- su espacio no alcanzó ni siquiera el 10% de los votos, ahora la alianza de “Red por Argentina” con el kirchnerismo podría ser una alternativa que garantice un caudal de votos interesante en el distrito.

El diputado Leonardo Grosso es parte de este armado que lleva a Felipe Solá a la cabeza y en el plano local es uno de los soportes de Katopodis. También los peronistas Oscar “Mono” Bitz y Alejandro Pathourus le aportan una base de territorialidad al intendente que, a pesar de sus 7 años de gestión, no tiene un armado sólido propio.

La única resistencia a que sea el intendente quien encabece una boleta única del peronismo que incluya a los k, es el espacio del concejal Hernán Letcher que en la última elección se alzó con el 30% de los votos, bajo el ala de Unidad Ciudadana. El votante filo kirchnerista que vio a Katopodis asumir con CFK, irse al tiempo con Sergio Massa  y luego con Randazzo podría optar un candidato más puro del kirchnerismo.

Para retener el distrito, Katopodis deberá negociar una lista de unidad que contenga al kirchnerismo o participar de una interna, en la que no tiene asegurado el triunfo. Jugar con un peronismo no K, no parece ser una opción ya que divido el peronismo, Cambiemos tiene muchas chances de hacerse con la intendencia.

Del lado amarillo, la euforia del 40% que se alcanzó en 2017 ya no es tal. Es que además de la notable caída de los dirigentes de Cambiemos a nivel nacional, el candidato Lopez Medrano no alcanza los niveles esperados de conocimiento entre los vecinos del distrito y el armado depende de la estructura que pueda brindar IvoskusPor su parte Brown, que parte del triunfo en la última elección, ya sacó los pies del plato oficialista.