El municipio de Tandil se encuentra en la fase 2 del aislamiento social, preventivo y obligatorio; ello significa que los locales gastronómicos sólo pueden funcionar de 9 a 19 horas al aire libre o con delivery y take away hasta las 11 de la noche. Sin embargo, el intendente Miguel Lunghi y concejales oficialistas de Juntos por el Cambio, plantearon la posibilidad de que los bares y restaurantes locales reciban comensales en su interior con un aforo del 30%. 

A partir del pedido del propio sector gastronómico, los concejales elaboran una serie de iniciativas que les permita a los locales funcionar con un aforo interno reducido y exclusivo para personas que hayan recibido al menos una de las dosis de las vacunas contra el Covid-19. Estas propuestas luego serán elevadas al gobierno de la provincia de Buenos Aires para su evaluación. 

“Los gastronómicos pidieron trabajar con un aforo, con aquellos que tienen una o dos dosis, que puedan ser atendidos en los locales", explicó el jefe de Gabinete del Municipio, Oscar Teruggi. 

Por su parte, los empresarios del sector presionan para que se les permita abrir sus puertas frente a la llegada de las bajas que temperaturas que generan una importante disminución en la clientela. 

Desde Juntos por el Cambio apoyan el reclamo y aseguran que se necesitan alternativas "que no lleven al cierre de empresas locales o suspensión de aperturas".

“No somos ajenos a la realidad imperante, pero creemos necesario equilibrar los requerimientos sanitarios con las necesidades y exigencias del entorno socio-económico, ya que venimos de una prolongada etapa de aislamiento y distanciamiento que ha agravado los problemas estructurales de nuestra sociedad; y es indispensable revertir esta situación”, señala el texto del proyecto.