La ola de despidos que no cesa en distintos ministerios de Nación y Provincia alcanzó también a más de dos centenares trabajadores del interior de la provincia de Buenos Aires. Se trata de 260 operarios de la Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos de Azul, a quienes no se les renovó el contrato de trabajo para 2018. Ante los inminentes despidos, los empleados de Fanazul vienen realizando protestas desde diciembre del año pasado y ayer cortaron la Ruta Nacional n° 3 durante nueve horas, medida de fuerza que generó la reacción del Gobierno de Mauricio Macri.

El interventor de la empresa de Fabricaciones Militares, Luis Riva, recibirá hoy a los trabajadores y, ante rumores generalizados sobre el cierre de la fábrica, aseguró que "no hay un plan para desactivar ni vaciar" las plantas que se encuentran en diversos puntos del país. Según consignó el diario local El Tiempo, el intendente electo por el FPV en 2015 y ahora en Cambiemos, Hernán Bertellys, “intentó gestiones en el Ministerio de Defensa pero no obtuvo respuestas”.

En la mañana de ayer,  un cartel en la puerta de acceso de la fábrica informó a los trabajadores del cierre de la planta desde el 2 de enero hasta el 14 de febrero para "realizar una evaluación de sus condiciones técnicas y de su capacidad productiva".