Ayer, la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires recibió denuncias de vecinos y gremios docentes de Tres de Febrero en las que aseguraban que en los espacios de primera infancia se estaban dictando clases presenciales. Este martes, el intendente Diego Valenzuela habló de “presiones” recibidas por parte del titular del organismo, Guido Lorenzino, y el jefe de Gabinete de la Provincia, Carlos Bianco.

“Ante las presiones recibidas de Carlos Bianco y Guido Lorenzino para cerrar los espacios de primera infancia, les cuento que son dispositivos sociales municipales no educativos, que dan estimulación y alimento a muchos chicos en barrios populares en cumplimiento de la ley 13.298”, aseguró el mandatario local a través de su cuenta de Twitter.

Por su parte, Lorenzino le había solicitado al intendente información sobre las actividades educativas presenciales “por las que se estaría incumpliendo el Decreto 241/21 del Poder Ejecutivo Nacional y la Resolución 1208/21 de Jefatura de Gabinete de la Provincia de Buenos Aires”.

Este lunes, el defensor del pueblo señaló que era “indispensable que se cumpla con los términos de la Resolución que restringe las actividades educativas presenciales para jardines y en todos los niveles, para bajar el nivel de contagios”.

Sin embargo, Valenzuela aseguró que los jardines de primera infancia “son dispositivos sociales municipales no educativos” y que no son “regulados por la Dirección de Escuelas de la Provincia”.

“En el distrito hay 6 espacios de este tipo, todos realizando una tarea social fundamental en esta pandemia, cumpliendo todos los protocolos y enmarcados en la declaración municipal de actividades esenciales'', agregó el jefe comunal de Tres de Febrero.

“No sabía que el Defensor del Pueblo respondía a las directivas del gobierno provincial. Su intervención es un acto de imparcialidad en el ejercicio de su tarea”, denunció Valenzuela.

Además, aseguró que acercarán “la información pertinente sobre el funcionamiento de este dispositivo social municipal” y adelantó que “si la Provincia pretende obligarnos a cerrar, vamos a hacer una presentación judicial para seguir funcionando”.

El intendente de Juntos por el Cambio sostuvo que estos espacios de primera infancia llevan adelante “una tarea necesaria en un momento delicado en lo socioeconómico como el que transitamos, con un 51 % de pobreza y un 15 % de indigencia en el Conurbano”.