Con el insólito plan técnico del Gobierno Nacional para revocar la expulsión del senador Edgardo Kueider ya en marcha, la política argentina se prepara para el inevitable ida y vuelta judicial y ya sufre, en todos los frentes, las repercusiones internas de la sacudida provocada por el caso de presunta corrupción del año. En el peronismo, el líder del Frente Patria Grande Juan Grabois salió con los tapones de punta contra la maniobra “de Javier Milei y Victoria Villarruel” para “liberar” a su legislador aliado: “El que no lo vea es un pelotudo”.

“Saben que yo a ‘Videlita’ Villarruel le tengo más aversión que al propio ‘Luzbelito’ Milei, pero la maniobra libertaria para liberar a Kueider, reponerlo en el cargo y que no diga de dónde salió la platita es obvia. Nadie vota con Milei gratis y nadie pacta con el diablo sin firmar un contrato”, lanzó el abogado y dirigente social en un fuerte posteo en redes sociales esta tarde a raíz de la pelea que se originó entre la fórmula que encabeza el Gobierno Nacional por la invalidez técnica de la sesión en la que se expulsó al senador, quien ya pidió que la Justicia revise el resultado.

X de Juan Grabois

Tras ello, el exprecandidato a presidente por Unión por la Patria (UP) publicó un video en el que profundizó sus críticas al plan del Gobierno Nacional, que por un error técnico “de principiante” de Villarruel como titular del Senado le terminó abriendo la puerta a Kueider para pedir la invalidez de la sesión y, con ello, anular su destitución como legislador nacional. Al respecto, Grabois aseguró que la cúpula libertaria está “cuidando” a su aliado, quien actualmente se encuentra preso en Paraguay.

“Cómo lo cuidan Milei y los libertarios al peronista ensobrado que anda traficando dólares por la Triple Frontera…”, refirió, en ese sentido, el dirigente del peronismo. Y remarcó: “Perdón la insistencia, pero esto revela tan claramente la matriz de corrupción, extorsión y sobornos que sostiene el régimen anarcocapitalista que el que no lo quiere ver es un pelotudo fuerte”. Con la situación de Kueider todavía por esclarecerse, es esperable que declaraciones como estas solo se multipliquen.