“Lo peor ya pasó”: La vieja promesa repetida por el propio Javier Milei
En 2024, el Presidente había dicho lo mismo en dos oportunidades distintas.
La bala entró. La derrota electoral en la provincia de Buenos Aires sacudió al Gobierno nacional de tal manera que se vio obligado a cambiar el tono discursivo. La administración de Javier Milei se niega a modificar su política económica de ajuste y motosierra, pero ayer el Presidente brindó un discurso atípico: fue moderador, evitó los insultos, las provocaciones, anunció mejoras en el Presupuesto 2026 para los sectores más vulnerables y llamó a trabajar “codo a codo” con los Gobernadores. Además, el jefe de Estado envió un mensaje a la población y aseguró que "lo peor ya pasó, no aflojemos”.
De esta manera, Milei acusó recibo del descontento social. Sin embargo, no fue la primera vez que el mandatario prometió que los momentos más difíciles quedaron atrás y que lo mejor estaba por venir.
El 10 de diciembre de 2024, el líder libertario afirmana que ya habíamos “superado la prueba de fuego”. “Estamos saliendo del desierto. La recesión terminó y el país finalmente ha comenzado a crecer. Gracias por confiar en este gobierno. Esto no quiere decir que hayamos llegado a puerto, pero sí quiere decir que podemos terminar el año con alivio y de que hemos dejado atrás lo peor”, decía entonces en otra cadena nacional.
Un mes antes, el 11 de noviembre de 2024, decía exactamente lo mismo. “Hoy ya podemos decir que la recesión se terminó y de ahora en adelante todo lo que queda es crecimiento. De acá para adelante son todas buenas noticias”, exclamaba.
Pero lo frase no le pertenece exclusivamente a Javier Milei. Años antes, en 2018, el entonces presidente Mauricio Macri también prometía frente al Congreso nacional que “lo peor” ya había pasado y vaticinaba años de crecimiento qué nunca llegaron.
Ahora, tras una paliza electoral, La Libertad Avanza reflota la vieja promesa de que lo más difícil queda atrás. Sin embargo, y a pesar de algunas mejoras anunciadas, el Presupuesto 2026 es una ley de ajuste que no modifica los planes del Gobierno y del Fondo Monetario Internacional.