"Mis empleados no llegan a fin de mes, no saben cómo pedir un aumento porque ven que no entra gente a comprar"
Camilo Alan, empresario textil de toda la vida, expresó su frustración por la situación económica del país. Cayeron 70 por ciento las ventas y avizora una situación más que dramática para todas las pequeñas y medianas empresas nacionales. "Para la macroeconomía, debe ser un fenómeno. Pero no ganamos un mango", planteó a Diagonales sobre la gestión de Javier Milei.
No son días fáciles para los dueños de las PyMES en la República Argentina. Camilo Alan lo sabe muy bien. El empresario textil expuso en la Comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados de la Nación y su discurso se mezcló con una sensación de bronca e impotencia, cuando con lágrimas en sus ojos, hizo un diagnóstico calamitoso sobre la situación del sector en este año y medio de gobierno de La Libertad Avanza.
Camilo charló con Diagonales y compartió su experiencia como propietario del negocio que tiene en Aguirre 640, en el barrio de Villa Crespo, y las dificultades que enfrenta debido a la inflación y la caída del consumo que repercute en la estrepitosa baja en las ventas.
"Estoy angustiado. Pero no por mí solo, sino por todos mis vecinos, mis colegas, la gente de las PyMES. Todo el mundo de la política sale a decir nosotros vamos a ayudar a las pymes, porque nosotros vamos a trabajar aquí, porque vamos a hacer, y siguen siendo los mismos. Si vas a hacer, ¿por qué no lo haces ahora, en vez de fundirme", aseguró Camilo.
Alan se siente desalentado por la falta de acción efectiva por parte de los políticos, a quienes critica por no abordar los problemas de las PyMES y la clase media. A pesar de su esfuerzo y dedicación, ha visto una disminución del 70% en sus ventas, lo que lo lleva a cuestionar cómo sobrevivir y mantener a sus empleados. Aunque aprecia algunos intentos de legisladores por querer ayudar, siente que la situación es gravemente insostenible y no ve una solución clara a corto plazo.
"Yo tengo 81 años. Pasé la crisis de Martínez de Hoz, la de Menem, la de Macri, y es cada vez peor. Cada vez peor. La verdad, sinceramente, no sé qué es lo que tenemos que hacer", remarcó.
"Veo que hay unos trolls que dicen que me pagan, que la televisión me paga para que yo hable. A mí nadie me paga. Yo lo que hago es trabajar y dar laburo, le doy empleo a la gente. Empecé de abajo, nací en un conventillo, vivíamos cinco en una pieza, crecí, mis padres me dieron educación. Y yo recuerdo eso. No me gusta que la gente esté pasando un momento malo. Como yo no tengo nada que perder, ¿a mí qué carajo me importa decir las cosas a los políticos, a los diputados, a quien sea? Para que sean más sensibles. Porque tienen familia, tienen amigos que están pasando un momento malo", destacó el empresario.
No se ahorró críticas para el presidente Javier Milei. "Este muchacho vino con la motosierra y está cortando cabezas, matando el consumo para bajar la inflación. Y resulta que la inflación no baja. La inflación no baja porque vos cuando porque no hay plata para consumir. Y eso pasa porque el sueldo no sube. Este es el problema que hay. Yo cada día vendo menos. La campera que uso sale 69 mil pesos de contado, y en Europa vale 70 euros. Es decir que no estamos caros, pero no se vende. Dos personas me compraron en toda la mañana. Dos personas", aseguró.
Alan se desespera: "Decime qué es lo que estoy haciendo mal. Y mi vecino igual, en la otra cuadra igual, en Villa del Parque igual, en Lugano igual, en Zarate igual. Así en todos lados. Bajó la venta un 70%. Estamos vendiendo a un 30%. Pero los gastos fíjos siguen aumentando. Yo con 300 mil pesos que cobro de jubilación, pago 700 de expensas, y de prepaga, ¿cómo hago?".
Camilo tiene salud y no tiene pruritos en ayudar pero también asegura que "no hay esperanza así, si siguen mintiendo". "Hace un año y medio que están en el gobierno. Sigue mintiendo, que van a venir inversiones, que vamos a bajar la inflación. La inflación no baja. Lo que hacen es bajar sueldos. Bajaron los gastos del Estado, se echó gente, no hay gasto público. Toda esa gente es la que nos consumía a nosotros. Toda esa gente que ganaba un peso era la que nos consumía a nosotros. Este muchacho viene y dice que es un fenómeno. Para la macroeconomía, sí, es un fenómeno. Pero vos y yo no recibimos un mango", observó.
También se detuvo en la apertura del control de capitales: "Abrieron el cepo. ¿En qué te beneficiaste vos? ¿Cuántos dólares vas a ir a comprar ahora vos? Yo no compré ningún dólar. Yo no estoy comprando ningún dólar. ¿A mí qué me importa el cepo? A mí me interesa mi proveedor que me vendía al valor del dólar oficial, que aumentó. Yo soy productor y vendedor de productos Este es un gobierno de colazo, hermano. Es un gobierno financiero. Este es el tema que hay".
"Nosotros que estamos en la producción damos trabajo a la gente. ¿Qué tenemos que hacer para salir como país? Tenemos que tratar de exportar. Como ha hecho Perú, Colombia, Brasil, como está haciendo China, Pakistán, otras partes del mundo están creciendo y están exportando al mundo, y nosotros estamos dormidos. Dejame de embromar, hermano", suspiró.
Alan hizo énfasis en la matriz productiva nacional. "Nosotros nos planificamos con maquinaria textil y del calzado. Cualquier cantidad de maquinaria de última generación. Quiere decir que estamos capacitados para darle trabajo a la gente y poder exportar. Pero eso se hace con impuestos accesibles como hay en otras partes del mundo para poder competir como en otras partes del mundo. Y hay otra cosa que está haciendo este gobierno. Está permitiendo entrar máquinas usadas para destruir la industria agrícola. Es una locura, hermano. Máquinas usadas. Estamos todos locos. Si acá se producen tractores. Los mejores tractores. Están pensando ese tipo de destruir la clase media, destruir la industria pequeña y mediana. Es una locura lo que están haciendo".
El drama de la posibilidad de cerrar el local está presente. "Yo hablo con mi encargada y mis trabajadores, y a veces ellos vienen con una cara muy larga. Están muy mal porque no llegan, no llegan a vivir, y no saben cómo decirme para pedirme aumento de sueldo. Porque ellos son los que están manejando la caja y ven que no entra plata", expresó.
"Los chicos ven que no entra gente a comprar, ¿cómo me pueden pedir más aumento de sueldo si yo no les puedo pagar porque mi negocio no vende? Como a mí les pasan muchas PyMES. Yo no voy a pedir crédito al banco para pagar sueldos, para pagar todo, porque ya me fundieron antes. Lo que me queda es cerrar", aseguró.
Camilo pidió que "piensen bien en las PyMES, que somos los que generamos empleo, damos mucho trabajo a la gente en comercio, en industria, en todos lados". Y propuso: "Si Milei es muy amigo de Trump, que Trump es peronista, aprovechemos ya que el señor presidente es nuestro amigo, y que use las PyMES como a las nuestras.
Y dio una idea: "Una prenda se hace con 15 pymes. Si a nosotros nos pidieran, por ejemplo 1000 pullovers por mes y otras 500 se exportarán a Estados Unidos, se podría tomar más gente. Y esa gente que trabaja me consumiría a mí. Esta es la forma. No hay otra. No es yendo a pedir plata al Fondo Monetario buscando evitar el colapso".