El presidente Alberto Fernández encabezó un acto en Lomas de Zamora por el Día de los Trabajadores de Empresas Recuperadas, junto a la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, y el líder del Movimiento Evita, Emilio Pérsico. Allí, el mandatario volvió a pedir por la unidad en el Frente de Todos y se mostró confiado en un triunfo electoral del espacio al asegurar que “una o uno” de los candidatos oficialistas va a ser el próximo jefe de Estado. 

 Fernández aseguró que “el futuro de la Argentina es muy promisorio”. “El 10 de diciembre va a haber otro gobierno y va a ser uno o una de los nuestros quien va a sucederme a mí. Lo que le tenemos que explicar a los argentinos que están desorientados, y tienen motivo para estar preocupados porque a veces las cosas no salen como uno quiere, a ellos tenemos que animarlos y hacerlos entender que el problema no está adentro, está enfrente”, añadió como antesala a lo que sería una dura crítica a la oposición de Juntos por el Cambio y Javier Milei. 

En ese momento, el Presidente le habló al electorado y pidió no entregarle "el poder a quien le sacó el 13% del ingreso a lo jubilados, no le entreguemos el poder a los que manejaban el PAMI cuando (René) Favaloro se suicidó, no le entreguemos el poder al irresponsable que habla de libertad y de cambiar el sistema, cuando es el mayor defensor del sistema desigual en el que vivimos”.

La primera crítica estuvo destinada a Patricia Bullrich al recordar su rol como ministra de Trabajo del gobierno de Fernando de la Rúa; la segunda, apuntó directamente contra Horacio Rodríguez Larreta, quien fue interventor del PAMI cuando el reconocido médico se quitó la vida a raíz de las deudas que tenía su fundación con el organismo; y la tercera, estuvo dirigida a Javier Milei y sus propuestas ultraliberales. 

El presidente Alberto Fernández en el acto del Día de los Trabajadores de Empresas Recuperadas

Además, mientras destacaba el papel y la importancia de la economía popular, el Presidente trajo a la memoria la crisis del 2001 y consideró que “los causantes” de la misma “son parecidos a los que hoy confrontan con nosotros”. 

"La ministra de Trabajo era Patricia Bullrich. Mucho no les preocupaban las empresas que cerraban", lanzó. Y agregó: “Hubo un segundo tiempo, dónde los mismos que gobernaban en el 2001, estaban gobernando el país. Acá en en 2018 vivimos la experiencia. Un día dijeron ‘no nos hace falta esta fábrica’ y decidieron cerrarla en 2018. El Estado miraba para otro lado. La recomendación que les habían a los empresarios era que si no les rendía, que importaran”. 

"Teníamos un ministro de la Producción (por Dante Sica) que venía del mundo financiero, que le recomendaba a los empresarios que iban a pedir un auxilio financiero, que cerraran sus empresas y que se fueran a producir a China o Vietnam e importaran desde allí", indicó el jefe de Estado. 

Además, señaló que los dirigentes de la oposición "son los que dicen que la economía popular es una banda de planeros que no quiere trabajar; los que dicen que hay que terminar con la indemnización por despido y las vacaciones pagas; los que plantean que hay que imitar a Qatar que no tiene sindicatos; los que creen que la escuela pública es un lugar de adoctrinamiento y quieren dejar la salud pública en manos de privados, y dejaron de construir hospitales en la Provincia de Buenos Aires”.

Sin embargo, para cerrar su discurso, Fernández dejó de hablar de la oposición y optó por enviar un nuevo mensaje de unidad al Frente de Todos. “Dejemos de pelearnos entre nosotros, compañeros y compañeras, porque nosotros somos lo mismo, somos hijos de Perón y de Evita, sabemos qué intereses defendemos, sabemos de qué lado pararnos. Y cuando llegue el momento, el que le toque gobernar va a estar parado al lado de los que trabajan, de los que necesitan, al lado de los desposeídos. Eso fuimos, eso somos y eso seremos siempre”, concluyó.