En medio de los fuertes debates en la esfera nacional por los presos políticos, el ministro del Interior Eduardo “Wado” De Pedro viajó a Jujuy a reunirse con la dirigente Milagro Sala, quien esta semana cumplió 6 años de su detención. Cabe remarcar que el caso de Sala se convirtió en uno de los principales ejes de críticas por parte del kirchnerismo en torno a la persecución ideológica por parte de Cambiemos.

“Estuve con Milagro Sala, que lleva 6 años detenida. Es necesario reconstruir una justicia que no persiga opositores y que garantice a las y los argentinos sus derechos, más allá de los poderes de turno. Es un principio básico del sistema republicano y la convivencia democrática”, informó esta mañana De Pedro a través de sus redes sociales.

“Hace unos días vimos cómo se articulaban los servicios de inteligencia y la justicia para armar causas en PBA. En 2020 se filtró un audio de Baca, expresidente del TSJ de Jujuy, donde admitía que Milagro estaba presa sólo porque lo necesitaba el Gobierno”, fueron las contundentes declaraciones del funcionario en Twitter, en medio de una discusión que divide aguas no sólo frente a la oposición, sino también en las propias filas del oficialismo.

Es que los reclamos por los presos políticos han sido un eje de desencuentros desde hace varios años, donde varios sectores ligados al Frente de Todos han criticado el silencio de las altas esferas del Gobierno respecto al tema. Quien mayor eco hizo en los últimos días fue el líder piquetero Luis D’Elía, quien incluso lanzó una irónica chicana a Cristina Fernández de Kirchner. “¿CFK? Bien, gracias”, publicó anteayer D’Elía al señalar la falta de acompañamiento de sectores del Gobierno hacia la situación de Sala.

En tanto, en los últimos días hubo varios gestos del ala cercana La Cámpora, organización que incluso lanzó una solicitada por la libertad de la dirigente jujeña, que incluía las firmas de figuras como Máximo Kirchner o Axel Kicillof, entre un centenar de referentes de los derechos humanos, el sindicalismo y la cultura.

Asimismo, el secretario de DDHH de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, también envió un mensaje en reclamo por la libertad de Sala. Mientras tanto, se esperan respuestas por parte del sector más allegado a Alberto Fernández, que intenta eludir las tensiones con el gobernador jujeño Gerardo Morales, principal apuntado por la persecución judicial contra la líder de la organización Tupac Amaru.