El presidente Alberto Fernández participó este jueves de la Cumbre del Mercosur y pidió al resto de los mandatarios fortalecer la unión del bloque regional para enfrentar los desafíos de la crisis económica mundial acentuada por la pandemia y la guerra en Ucrania.

Desde el Centro de Convenciones de la Conmebol en la ciudad de Luque, en Paraguay, la sede de la cumbre de los líderes de la LX Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur y Estados Asociados, Fernández se refirió a la crisis argentina y admitió que el país atraviesa una situación muy compleja.

"Argentina está convulsionada económicamente", resaltó el jefe de Estado mientras el dólar blue llegaba a los 338 pesos, aumentando 21 pesos en un solo día. Sin embargo, el Presidente no ahondó demasiado en la situación económica del país y puso el acento en la crisis internacional. 

Fernández se refirió a la recesión mundial y a la crisis alimentaria, agravada por la guerra en Ucrania y aseguró que, en ese contexto, la región sudamericana, especialmente los países del Mercosur, tienen "imperativo moral" para "producir el alimento que el mundo necesita". 

"Estamos frente a una guerra desatada por la invasión de Rusia a Ucrania, sostenida también por Estados Unidos y la OTAN, Ucrania padeciéndola y el mundo hambreándose", indicó y aseguró que el Mercosur "tiene lo que el mundo busca para el mañana": alimentos y energía.

Por ese motivo, pidió al resto de los mandatarios presentes en la cumbre estar "más unidos que nunca de lo contrario, vamos a cometer el peor de los errores"