Tras un fin de semana plagado de repercusiones sobre el fuerte discurso de Cristina Fernández de Kirchner en Chaco, el presidente Alberto Fernández pone un breve paréntesis a la debacle interna del FdT y encara este lunes una mini gira internacional por España y Alemania. El jefe de Estado utilizará esta agenda para despejarse de la agenda nacional y se reunirá con mandatarios y empresarios en busca de inversiones.

Con el foco puesto en fortalecer las exportaciones al mundo, Fernández iniciará la recorrida este lunes acompañado por una comitiva de su Gabinete, donde todavía no se hizo mención sobre la presencia de Martín Guzmán. El dato no es menor si se tiene en cuenta que el titular de Economía de la Nación está ubicado en el centro de todas las críticas del kirchnerimo.

En tanto, quienes sí están confirmados para acompañar al Presidente son el canciller Santiago Cafiero; la secretaria de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería, Cecilia Todesca; y la portavoz Gabriela Cerruti, figuras que hasta al momento están apuntadas para emprender el viaje.

En primer lugar, el mandatario argentino concretará el martes un nuevo encuentro bilateral con el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, quien estuvo en Buenos Aires en junio del año pasado; y también se encontrará con el rey Felipe VI, según consignó la agencia Télam.

Por otro lado, entre miércoles y jueves Alberto Fernández será recibido en Alemania por Olaf Scholz, el socialdemócrata que meses atrás reemplazó a Angela Merkel en el Gobierno germano.

En ambos países Fernández también tiene previsto encabezar una ronda de encuentros con empresarios en búsqueda de un mayor nivel de inversiones y de potenciar las exportaciones argentinas en esos mercados.

Cabe destacar que, en ausencia de Fernández, Casa Rosada quedará a cargo de las directivas de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien el viernes pronunció un fuerte discurso donde manifestó a todas luces las disputas internas del oficialismo. Allí, CFK volvió a remarcar las diferencias con el albertismo, reivindicó el “debate” del FdT e hizo una explícita defensa de la agrupación La Cámpora.