Caminando junto a la Sociedad del Conocimiento
Por Luis Papagni
En momentos en que está de moda hablar de Internet de las cosas (Internet of things, abreviado IoT) es importante al analizar el tema del desarrollo de la actividad tecnológica como economía en crecimiento para nuestro país, y considerar la magnitud que tienen las exportaciones basadas en conocimientos, ya que ocuparon el tercer lugar en el país, detrás de la soja y los automóviles. En ese sentido, se debe separar el análisis en tres etapas la de la estimulación de estudio en TICs, la formación y profesionalización, y la industrialización y calidad de los productos elaborados en nuestra región.
Se estima que en el país hay un profesional de sistemas cada 6.000 habitantes, y la meta del Estado Nacional es llegar a uno cada 4.000. Este tipo de carreras se declararon prioritarias y el Ministerio de Educación desde el año 2010 ofrece Becas (conocidas inicialmente como las becas del Bicentenario) para quienes deseen estudiarlas. Pero, ¿cómo fomentar el interés? Es importante estimular desde la educación básica, en primer lugar, el gusto por la matemática, la lógica, la física y la química para desmitificar a las ciencias duras y establecer un plan de educación TICs en todas las escuelas secundarias de forma obligatoria, para que los egresados salgan con los conocimientos mínimos de las estructuras de programación. Al aprender a programar desarrollamos habilidades de pensamiento que sirven para cualquier tipo de actividad tales como la capacidad de abstracción y de planificación, la descomposición de problemas y el trabajo en equipo, entre otras. No se trata de solo programar se trata de una mejor manera de pensar en esta nueva Sociedad del Conocimiento, donde la educación digital, se torna fundamental para los próximos años de desarrollo.
Luego es importante acentuar el proceso de contención de las universidades y pensar en la necesidad de que los empleos soliciten y permitan la finalización de los estudios de grado, para tener una capacidad más profesional y analítica, que solo el conocimiento de un lenguaje de programación. Cabe destacar que en la ciudad de La Plata no solo está la UNLP, sino también la Universidad Católica y la Universidad Tecnológica Nacional donde es posible estudiar carreras de grado vinculadas a la informática.
La alta demanda de profesionales informáticos y el alto grado de rotación, exige a las empresas atención en el proceso de retención de personal, generando la pertenencia en los proyectos a desarrollar, para ofrecer como resultado un producto de calidad y con continuidad. Se estaría descuidando el valor de la industria si las fábricas de software no pueden ofrecer productos terminados que den valor y crecimiento a los sectores para los cuales desarrollan. Y en cuanto a la calidad, es importante la profesionalidad inserta en el desarrollo productivo, por eso, la iniciativa de contar con profesionales en la materia que además tengan sus actividad correctamente reguladas por sus respectivos Consejos Profesionales, le dan valor agregado al producto final, garantizando los resultados de su funcionamiento y ejecución.
Un buen plan de acción, con políticas de Estado que impulsen el crecimiento y el desarrollo de la actividad del Conocimiento- pensada como un proceso de construcción colaborativo, abierto y permanente- que comience desde formación escolar, la contención universitaria y el desarrollo industrial con acciones que ayuden a fomentarlo, como protección de la industria local, establecimiento de polos tecnológicos y leyes que apoyen el crecimiento, serán fundamentales para la adecuada inserción de nuestra economía en la riqueza de la Sociedad del conocimiento.