Elisa Carrió volvió a dejar en claro su rechazo a la postulación del neurocientífico y ahora dirigente radical, Facundo Manes. Lo hizo al poner en duda las condiciones del profesional para ocupar una banca en el Congreso y dio a entender que quiere hacer uso de esa posibilidad "como escalera para otra cosa".

La líder de la Coalición Cívica manifestó que Manes "sabe de neurociencia", pero advirtió que otra cosa es "defender la Nación en el Congreso". "Yo soy una política exitosa pero no puedo ser jefa de terapia intensiva del Finochietto. No puedo salir a operar porque sería una inconsciente, no me puedo ofrecer para hacer algo que no sé hacer porque en el fondo estoy mintiendo", comparó la dirigente. 

En conversación con TN, ironizó: "hoy se propone a Elisa Carrió que sea jefa de médicos cirujanos del Hospital Austral, ¿Qué dirían? Nadie se operaría en el Austral".

Pero el fragmento más caliente de sus declaraciones fue cuando dijo estar "harta" de que la política sea utilizada para otros objetivos: "Estoy harta de que el Congreso sea una escalera para otra cosa. Nunca tome ser legisladora para catapultarme a otro cargo porque no me gusta la especulación", lanzó.  

Además, descartó estar enojada con el neurólogo y contestó que "es un problema del radicalismo", al tiempo que manifestó que para ir al Congreso "hay que saber leer, escribir y redactar un artículo de una ley". 

Es por eso que Carrió expresó que aquellos que vayan al Parlamento deberían estar preparados. "Yo me prepare desde los 15 años", señaló, y expuso que antes de llegar a la Cámara de Diputados fue jurista, profesora de derecho constitucional y convencional constituyente. "Sabía redactar una ley, sabía qué hacer en procesos constitucionales", sumó.