Tras la conflictiva salida de Matías Kulfas del Gobierno, Cristina Fernádez de Kirchner vuelve al centro de la escena pública en un acto del sector sindical. Será este lunes cuando la Vicepresidenta partícipe de un plenario de la CTA de los Trabajadores, pautada para desarrollarse en la ciudad bonaerense de Avellaneda. 

La agenda de la vicemandataria se conoció en las últimas horas y ya hay expectativas sobre las definiciones, gestos y declaraciones que deje en el marco del acto donde oficiará de anfitrión el líder de la CTA y dirigente del Frente de Todos, Hugo Yasky. También se espera la presencia del ex intendente y actual ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi.

Cabe recordar que será el primer acto del que participe Fernández de Kirchner tras el acto por los 100 años de YPF que derivó luego en la renuncia de Kulfas. Asimismo, esa ocasión dejó la postal de la Vicepresidenta tomada de la mano con Alberto Fernández, acaso un gesto que reavivó las esperanzas de una conciliación dentro del Frente de Todos luego de varios meses de duro enfrentamiento y ausencia de diálogo.

En tanto, el evento de este lunes coincide con el Día de la Bandera y se convocó bajo el lema: “20 de junio. La vigencia de Belgrano. Estado, mercado y precios: producción, trabajo y política social en una Argentina bimonetaria”, una serie de tópicos que CFK ya ha repasado en las últimas apariciones suyas en actividades políticas.

En su último discurso, la ex Presidenta decidió lanzar sus definiciones sobre la interna del Frente de Todos y llamó a transitar el conflicto en favor del proyecto político original. “Debemos centrarnos en que gobernar es administrar esas tensiones en favor de las grandes mayorías. El que quiera gobernar la Argentina sin tensiones ni conflicto, que se postule a la presidencia de Suiza”, dijo CFK y generó fuerte eco.

En ese marco, Fernández de Kirchner envió un fuerte mensaje sobre el manejo de la construcción del gasoducto Néstor Kirchner, donde hizo sus señalamientos a la empresa involucrada en la fabricación de caños sin costura -necesarios para la extracción de gas- y le exigió que traigan su producción a Argentina. El gesto de CFK provocó la retirada y descargo de Matías Kulfas, quien provocó un escándalo al responderle a la vicemandataria con una carta y declaraciones en off.