Tal como estaba programado, comienza a regir a partir de este viernes la tarifa completa de transporte público para aquellos usuarios que decidieron desligarse del subsidio estatal. De este modo, quienes en las últimas semanas se anotaron en la plataforma oficial de Nación para prescindir del beneficio, ahora empezarán a abonar el precio completo.

La medida había sido anunciada el pasado jueves 16 de octubre por Diego Giuliano, ministro de Transporte de la Nación, quién informó a los pasajeros del transporte público que tendrían la posibilidad de prescindir de este beneficio si así lo deseaban. 

Cabe destacar que, en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), el pasaje de colectivo mínimo sin subsidio costará $700 por viaje, mientras que en los boletos de tren la tarifa será de $1100. A su vez, quienes renuncien al subsidio también perderán el acceso al descuento del Atributo Social Federal y la RED SUBE. Como así también a todos los Atributos Locales definidos por las jurisdicciones donde la tarifa se abona con SUBE.

La medida fue presentada desde Nación en el marco de debates de campaña, donde el actual candidato Javier Milei comenzó a agitar la idea de la mentada “motosierra” como sinónimo de recortes en el Estado y cortar con “gastos innecesarios” en áreas clave. En ese marco, el transporte público y las tarifas también cayeron en la bolsa del discurso libertario.   

Quienes quieran renunciar al subsidio al transporte público deberán contar con la tarjeta SUBE registrada. En caso de querer renunciar a la tarifa subsidiada, cada usuario deberá registrar su tarjeta. A partir de la SUBE registrada, se renuncia a través de la web argentina.gob.ar/SUBE únicamente, donde se debe llenar un formulario en el que se informa las tarifas sin subsidio tanto para trenes como para colectivos urbanos.