En las últimas horas, el juez federal de Santiago del Estero, Guillermo Molinari, se declaró incompetente para seguir adelante con la causa que investiga a Silvio Robles, el vocero del presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Horacio Rosatti, por la filtración de las conversaciones que tuvo con Marcelo D’Alessandro. Ahora, la causa pasará a Comodoro Py. 

El expediente había comenzado con una denuncia radicada por el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora. Incluso el juez ya había dictado medidas de prueba como el secuestro del celular de Robles, quien se negó a entrar su teléfono. Sin embargo, este jueves, el magistrado señaló que debido a que los involucrados son funcionarios de la ciudad de Buenos Aires, allí debe tramitarse la causa. 

“Este Juzgado Federal no debe continuar conociendo en la presente causa que, por el territorio y las personas involucradas, debe ventilarse ante la jurisdicción de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, resolvió Molinari es respuesta a un pedido del fiscal federal Pedro Simón. 

De todas maneras, el juez defendió la decisión de pedirle a Robles que presente sus teléfonos celulares: “Ante el conocimiento formal de la posible comisión de un ilícito y de competencia federal, y a fin de, en el carácter de magistrado, el juez tiene el deber de realizar las medidas necesarias y urgentes para resguardar los elementos del supuesto delito y evitar su detrimento, y remitir con premura la causa al juez que resulte competente”, explicó.

Por su parte, Zamora había denunciado a Robles tras la difusión de los chats con D'Alessandro por los presuntos delitos de tráfico de influencias y violación de los deberes de funcionario público. En las conversaciones que se conocieron en los últimos días, el vocero de Rosatti le suministra información al ministro porteño vinculada a la polémica que se había originado en torno a la integración del Consejo de la Magistratura y la coparticipación de la ciudad de Buenos Aires. 

En una parte del diálogo entre ambos, comparten un link con información sobre la disputa judicial por los fondos coparticipables e irónicamente hablan del “fallo” Robles, en referencia a las presuntas gestiones que habría hecho el asesor del titular de la Corte.

El escándalo desatado por la filtración de esos chats obligó a D’Alessandro a pedir una licencia y dejar su cargo en el gabinete de Horacio Rodríguez Larreta, quien intenta desesperadamente mantenerse al margen de la polémica. La causa ahora pasará a los tribunales de Comodoro Py.