Horas de tensión se viven en el Gobierno tras un nuevo caso de entramado de corrupción que pone en jaque la figura de “El Jefe” Karina Milei y su equipo más cercano de funcionarios.

Las declaraciones del ahora extitular de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) Diego Spagnuolo, filtradas hace 48 horas y en los que alude a una oscura trama de negocios para favorecer a privados por la venta de medicamentos y coimas que apuntan a la hermana del Presidente, son un golpe más a la reputación de un gobierno que no para de acumular escándalos.

Esto se produjo en un momento de debilidad para la Casa Rosada, quizás el peor en los 20 meses desde que La Libertad Avanza (LLA) está en el poder.

Debe atender el vendaval de leyes en contra de su plan económico de estabilidad por inanición que se tratan en el Congreso, al mismo tiempo que interviene en el frente financiero para evitar una corrida hacia el dólar que generaría una disparada inflacionaria, y luego del cierre de candidaturas en la elección de medio término que dejó nuevas alianzas con la “oposición negociable”, pero también a muchos políticos propios y ajenos descontentos.

En este contexto, la elección del momento para la difusión de los dichos del no es menor. Dentro del Gobierno refieren a filtraciones internas.

En las declaraciones de Spagnuolo, que apuntó contra Karina Milei como pieza clave de un aparente arreglo entre la droguería Suizo Argentina y sus "proveedores", con cobros irregulares de cánones de entre “el 3% o el 4%", hay más elementos que apuntan al titular de la Cámara de Diputados Martín Menem y Eduardo “Lule” Menem, actual subsecretario de Gestión Institucional de la Secretaría General de la Presidencia, y brazo político de Karina.

Sobre el clan Menem estaba dirigida parte de la conversación que hace poco más de un año tuvo el periodista oficialista Alejandro Fantino en su canal de streaming Neura, cuando entrevistó a Spagnuolo.

En esa emisión del 8 de julio del año pasado, el conductor disparó contra las “segundas líneas” del armado del Gobierno, e intentó “avivar” al extitular de ANDIS para que no “se dejara usar”.

X de Rosario Agostini

“Habitualmente la política se repite en sus formas. No digo que La Libertad Avanza repita lo que la vieja política repitió, pero a algunos los conocemos bastante. Son segundas líneas o gente que pasa por debajo del radar y define muchas cosas. Son gente genéticamente voraz. Muchas veces a los honestos como vos los usan como forros y después los terminan tirando a un tacho de basura”, advirtió Fantino.

En uno de los pasajes más explícitos, y ante el nerviosismo de Spagnuolo, el exconductor de Animales Sueltos pareció ir al hueso contra “Lule”: “Tenés que tener cuidado. Hay que tener cuidado que no pase ni en Totora, Santa Fe, ni en Lule, Tucumán, porque vivos hay en todos lados y hay que tener muchísimo cuidado”.

Fantino aludía a la localidad de Lules, con ese, queda en Tucumán, pero el operador mediático omitió la S final, lo que conduce a pensar que señalaría al tío de Martín Menem.

Poco más de un año después de este reportaje de Fantino con Spagnuolo, se resignifican estos mensajes. Más si se tiene en cuenta la cercanía de ambos con Javier Milei.

Los dos sabían las implicancias de esas advertencias.