En su conferencia de prensa semanal, la portavoz presidencial Gabriela Cerruti se refirió a las repercusiones sobre el crimen del kiosquero asesinado el fin de semana en Ramos Mejía, y aseguró que el Gobierno “está llevando adelante medidas”. La vocera de Casa Rosada también expresó el “profundo asco” que gravita en el Gobierno ante la presunta “utilización” política del hecho.

“Nos produce profundo asco la utilización electoral del dolor de una familia”, dijo la portavoz de Alberto Fernández, en las primeras horas de este jueves. La funcionaria intentó dejar asentado que el Gobierno está llevando adelante políticas de seguridad.

“El Gobierno comprende el problema de la inseguridad y está llevando adelante una cantidad importante de medidas. Se han enviado gendarmes a diferentes provincias. En este caso, los sospechosos están detenidos”, dijo y agregó: “Tiene que haber más prevención, más policía en la calle. Seguridad no solo es detener a una persona después de cometer un delito, sino prevenir, que hayan comercios y ciudadanos seguros. Vamos a hacer lo que haya que hacer para terminar con el flagelo de la inseguridad”.

Cerruti sostuvo que el Gobierno es consciente de que las principales preocupaciones de la sociedad están enfocadas en “precios e inseguridad” y que en ambos temas se “está trabajando con mucho “compromiso” para llevar soluciones. “Somos absolutamente empáticos con el reclamo de las familias argentinas”, expresó.

En cuanto al clima pre electoral, Cerruti aseguró que no se esperan mayores cambios en relación al posible resultado de los comicios. “Esperamos que el lunes Argentina siga siendo un país normal, después de un acto democrático normal, seguir gobernando en la segunda etapa del gobierno”, expresó. “No empieza ni termina el mundo el lunes. Se Gobierno todos los días”, agregó.