Este domingo, el presidente Alberto Fernández recibió y aceptó las renuncias de los ministros de Trabajo, Claudio Moroni y de Desarrollo Social, Juan Zabaleta. Estas salidas se dan con la particularidad de que ambos fueron presionados a irse por La Cámpora, aunque por diferentes motivos. El primero de ellos era uno de los “funcionarios que no funcionan” señalados por el kirchnerismo duro, y Zabaleta vuelve a cuidar su territorio que había quedado en manos del camporista, Damián Selci, que le disputaba su conquista de cara a 2023. 

Con estas renuncias, ahora Fernández tendrá que definir en las próximas horas los reemplazantes. Según trascendió, si no hay sorpresas, el anuncio de los nuevos ministros, sumado al de la ministra de las Mujeres, se darían a conocer este lunes y la jura un día más tarde. 

Zabaleta que había dejado Hurlingham en manos de La Cámpora y hoy por hoy ya está con la mente en su distrito, tendría como reemplazante en el Ministerio a Victoria Tolosa Paz, quien ya tuvo una experiencia en el área. 

Claudio Moroni era uno de los pocos resortes que sostenía Alberto Fernández, desde los cuales pensaba su supervivencia en la alianza oficialista. En los últimos días, estuvo en el ojo de la tormenta por el conflicto en neumáticos y por la trágica actualidad del mundo del trabajo donde, con apenas un 7% de desocupación, crecen la pobreza, la indigencia y el salario no para de caer frente a la inflación. Para este Ministerio por ahora los nombres son puras especulaciones.

La dinámica del cristinismo de bombardear a los funcionarios que respondían a Alberto Fernández, sumado al fracaso de su gestión, parecen haber obligado a varios funcionarios a replantearse la idea de continuar en el barco.