En medio del escándalo y las denuncias por contrataciones irregulares en el Banco Nación, Sergio Massa le pidió a Silvina Batakis que despida a María del Carmen Barros, gerenta general de la entidad.

Barros fue quien había contratado a Verónica Laura Asad, conocida como "Pitty, la numeróloga”, para un coaching por $1.800.000. Además, había designado a su propio hijo, Juan Pablo Pedemonte, al frente de una gerencia en la casa matriz del banco; y a Héctor Javier Silva, exmarido de Batakis, en el cargo de Gerente de Sistemas del BNA. 

Luego del escándalo desatado por el caso de Martín Insaurralde y las denuncias por enriquecimiento ilícito contra el ex jefe de Gabinete bonaerense, Unión por la Patria -y especialmente Sergio Massa- buscan distanciarse de cualquier sospecha de corrupción y mostrarse tajantes al respecto. 

Por su parte, el Banco Nación ya había iniciado un sumario a Barros por las presuntas contrataciones irregulares y la entidad lleva adelante su propia investigación. 

Por otro lado, el juez federal Daniel Rafecas y el fiscal Guillermo Marijuan llevan adelante una causa judicial a partir de la denuncia realizada por la diputada nacional Graciela Ocaña. 

La Justicia Federal ordenó el allanamiento del BNA e imputó a Batakis y a Barros por los delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario público, defraudación contra la administración pública, administración fraudulenta y peculado y dispuso una serie de medidas de prueba.