El campo calentó la previa a la reunión con el Presidente y reclamó por el "calamitoso" estado de las rutas
Tras el cierre de Vialidad Nacional, el titular de la Sociedad Rural, Nicolás Pino, pidió mejorar la infraestructura vial de todo el país
El presidente Javier Milei se reúne por primera vez con los representantes de la Mesa de Enlace en medio de un clima de fuerte tensión con el sector por el aumento de las retenciones a las exportaciones de soja y maíz. Horas antes del encuentro, el titular de la Sociedad Rural, Nicolás Pino, sumó un nuevo reclamo y pidió mejorar la infraestructur vial del país.
“Es calamitoso el estado de las rutas. No solo se complica transitar, sino que ponemos en riesgo la vida todo el tiempo”, señaló el dirigente rural.
“De nada sirve producir más si no lo podés transportar”, resaltó. “Es una demanda que le hacemos al Gobierno, pero no en función únicamente de nuestro sector. Por esas rutas circulamos nosotros, nuestras familias y todas las familias del país”, agregó días después de que el Gobierno Nacional decidiera cerrar Vialidad Nacional.
El encuentro entre los representantes de las entidades agropecuarias y Javier Milei se lleva adelante en el predio de la Sociedad Rural en el barrio porteño de Palermo. La agenda de la reunión es amplia y además de las retenciones y el estado de las rutas, incluye otros temas que causan malestar en el sector como la degradación del INTA y el INASE, y la rentabilidad de los productores.
“Argentina necesita recuperar competitividad”, afirmó Pino antes de que comenzara el encuentro con el Presidente. De todas maneras, el titular de la Sociedad Rural buscó bajar tensiones al segurar que estaban “muy contentos” por la presencia del jefe de Estado, e indicó que “la actividad del campo es muy amplia, hay lugares o producciones donde los números son muy finos, y producciones como la ganadería que están viendo buenos números y condiciones para el trabajo”.
Sin embargo, advirtió que el diálogo “tiene que venir acompañado de decisiones concretas”.
Uno de los mayores puntos de conflicto entre el campo y la administración libertaria tiene que ver con las retenciones y el tipo de cambio. El pasado 30 de junio se terminó la reducción temporal de retenciones para soja y maíz, que volvieron a tributar el 33% y el 12% respectivamente.
Los productores agrarios aseguran que con esos impuestos a la exportación, los márgenes productivos son prácticamente nulos. Un informe de CREA aseguró que con las retenciones al la soja del 33%, el 80% del área sembrada queda por debajo del umbral de rentabilidad.
Finalmente, el sector exportador sostiene que, pese a las subas del dólar financiero, el tipo de cambio sigue siendo bajo.