Si la batalla cultural es más bien una guerra, y lo es, pocos batallones son tan importantes como la fuerza de choque frontal. Y de ella se encarga el portavoz Manuel Adorni, dueño de una estructura elefantiásica montada bajo las narices del Presidente. Pero, como diría Javier Milei, en el Estado “donde tocás, sale pus”, y la Vocería no es la excepción: su historial en año y pico en funciones, relevado por Diagonales en un informe exclusivo, delata más de 50 subáreas con 180 empleados designados a dedo, familiares metidos en el Estado y ascendidos y, para coronar, un ejército de trolls sin preparación que le cuesta a los argentinos $85.000 millones al año para agitar, irónicamente, la bandera del ajuste.

Quizás sorprendió a algunos ver al Secretario de Comunicación y Medios este miércoles en Casa Rosada. En el último mes, Adorni había brindado una sola conferencia de prensa; en los últimos 90 días, un total de 11. Su notable aversión al trabajo tiene una sencilla explicación a mano: la priorización de la campaña electoral en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), donde el influencer comanda la lista de candidatos de La Libertad Avanza (LLA) a la Legislatura. Desde luego, a diferencia de lo que sucede en cualquier empleo en el que el presentismo sí vale, aquí los “faltazos” del funcionario no le impidieron embolsarse sus $3,5 millones mensuales pagados con fondos públicos.

El colosal clan Adorni: 50 subáreas, 180 designaciones a dedo y un mega ejército de trolls de $85.000 millones

El hábil jugador de Age of Empires no llegó allí de la noche a la mañana. Fue nombrado Subsecretario en diciembre de 2023; diez meses después, recibió un controversial ascenso a Secretario de Estado pero con remuneración de Ministro, razón por la que percibe semejante paga todos los meses. En su momento, el periodista devenido funcionario explicó que, pese al cambio de rango, tiene “las mismas tareas que antes”, por lo que no termina de ser claro cuál fue el motivo de la modificación jerárquica y de la jugosa ampliación salarial. Como se verá, sin embargo, esa trama no es desconocida al interior del clan Adorni.

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La estructura, la plantilla y el presupuesto: Los datos detrás de la gran armada libertaria

En la Secretaría hay más de lo que se observa a simple vista. Primero se advierte una inmensa estructura compuesta por una Unidad de Gabinete de Asesores y 4 Subsecretarías. Lo más interesante es lo que hay debajo: 8 Direcciones Nacionales, 4 Direcciones Generales, 19 Direcciones simples y 19 Coordinaciones plagadas de trabajadores recientemente incorporados y con tareas inciertas. Destacan, por caso, la Dirección de Seguimiento de Medios Públicos, la Coordinación de Monitoreo y Métricas, o las Direcciones Creativa, de Redacción, de Fotografía, de Producción, de Producción Audiovisual, de Imagen Institucional, de Cooperación Internacional, de Campañas…

Igual de llamativa es la planta de empleados públicos contratada por el portavoz. En 2024, un estudio de Corta reportaba que en junio pasado el área contaba con 101 trabajadores a su disposición. Pues bien: en marzo, Adorni amplió su plantilla a 248 funcionarios – un aumento de casi el 150% perpetrado en menos de doce meses. Ese cuarto de millar de trolls incluye más de 50 asesores, cerca de 14 consultores, y un sinfín de redactores, editores, asistentes, realizadores y demás agentes libertarios para el combate en redes. Los detalles fueron revelados por Guillermo Francos en su informe de gestión de 2025.

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La pregunta del millón, o de los millones, es qué presupuesto posee este colosal ejército libertario. La respuesta fue otorgada parcialmente por el Jefe de Gabinete: en enero recibió unos $25.400 millones, y en febrero absorbió otros $5.400 millones de la Secretaría de Prensa. Sin embargo, develó Corta, a estos fondos se suman unos nada desdeñables $55.000 millones extra en concepto de “asistencia financiera a empresas públicas y otros entes dependientes de la Secretaría”; léase, fondos de Télam, RTA y otros organismos estatales cerrados por el Gobierno o en proceso de vaciado y desfinanciamiento.

Así, el pozo acumulado presenta un total de $85.000 millones a disposición de Adorni. El presupuesto anual surge, como es sabido, exclusivamente de dinero público, y se traduce, por caso, en jubilaciones mínimas con bono para casi 240.000 abuelos, o en 287.000 salarios mínimos de acuerdo con la remuneración base vigente. Para compararlo con cifras algo más grandes: con los fondos totales de la Vocería en 2025, el Gobierno podría haber octuplicado la escueta ayuda de $10.000 millones que le dio a Bahía Blanca tras la trágica tormenta de marzo, si bien después terminó ampliando el monto por presión popular.

El colosal clan Adorni: 50 subáreas, 180 designaciones a dedo y un mega ejército de trolls de $85.000 millones

Juan Doe y los 180 elegidos de Adorni (sin título, especialización o experiencia laboral)

Al hilar más fino, aquel organigrama inmenso devela una verdad incómoda para el titular de Comunicación y Medios. No solo el nutrido presupuesto de su cartera y su enriquecida estructura interna jaquean el mantra de austeridad, ajuste y motosierra del Gobierno, sino que, para peor, la plantilla de empleados del cuasi Ministro esconde un dato demoledor: mientras que 61 puestos dentro de la Vocería fueron heredados de otras áreas (como la del exfuncionario caído en desgracia Eduardo Serenellini), los cálculos indican que Adorni designó él mismo los restantes 187 cargos dentro de la Secretaría – una fiesta de nombramientos, asesores y trolls pagados con dinero público.

El colosal clan Adorni: 50 subáreas, 180 designaciones a dedo y un mega ejército de trolls de $85.000 millones

Véase el que es, tal vez, el caso predilecto: el de Juan Doe. En febrero del año pasado, Juan Pablo Carreira fue escogido para desempeñarse desde abril como Director Nacional de Comunicación Digital. Por ese cargo, el tuitero libertario anti-Estado estaría ganando cerca de $2,5 millones al mes. La designación fue autorizada a través del decreto 482/2024; sin embargo, lo más curioso es que debajo del artículo 1°, que establece el nombramiento formal así como el sueldo del funcionario, se lee una bonita aclaración sobre la formación académica y profesional necesaria para el puesto.

En el documento figura: “Se efectúa la presente designación transitoria con carácter de excepción respecto a las disposiciones del artículo 14 del Convenio Colectivo de Trabajo Sectorial del Personal” del SINEP (Sistema Nacional de Empleo Público). El artículo en cuestión detalla “los requisitos mínimos de acceso a cada nivel escalafonario” de rango y salario: por ser Nivel A, a Carreira se le debería exigir “título universitario de grado”, “especialización avanzada en los campos profesionales correspondientes” y “experiencia laboral en la especialidad atinente por seis años”. Como Juan Doe no cumple con las exigencias de idoneidad para el cargo, Adorni lo exceptuó de ellas.

El colosal clan Adorni: 50 subáreas, 180 designaciones a dedo y un mega ejército de trolls de $85.000 millones

El clan Adorni: Francisco y su ascenso fugaz en el Ministerio de Defensa

Similarmente sorprendente es el caso del otro Adorni que cobra fondos públicos. En febrero de 2024, el vocero consiguió que el ministro Luis Petri (el mismo que se patinó una cifra estrafalaria en un Black Friday para funcionarios) nombre a su hermano Francisco Jorge Adorni como asesor de la cartera de Defensa. Se ve que a “Pancho” tuvo un debut alucinante en el puesto, porque un mes después se ganó un ascenso y fue convertido en Titular de la Unidad de Auditoría del Ministerio de Defensa, por lo que cobra cerca de $4 millones mensuales.

El colosal clan Adorni: 50 subáreas, 180 designaciones a dedo y un mega ejército de trolls de $85.000 millones

Sea todo dicho, se sabe que el clan del portavoz se extiende aún más lejos – solo basta con recordar a la madre y la tía del dirigente, ambas con trayectoria en la Legislatura bonaerense, para ver los lazos de larga data entre el apellido y la administración pública. De cualquier manera, el de Manuel Adorni parece ser el caso más paradigmático de la familia libertaria: un influencer que odiaba al Estado pero ahora cobra como Ministro, hizo crecer en un 150% la planta de empleados a su cargo, montó una enorme estructura ciclópea nutrida de funcionarios sin formación, y se gasta $85.000 millones para copar la calle virtual con una horda de trolls y tuiteros antiajuste. Bien de casta.

EL EJÉRCITO DE TROLLS DE MANUEL ADORNI | Diagonales Stream