El acto de fin de año del Frente de Todos en el Estadio Único de La Plata dejó fuerte definiciones, en especial ante el discurso pronunciado por la vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner. El señalamiento de la ex jefa de Estado al mandar a “buscarse otro laburo” a ministros generó fuertes reacciones en la opinión pública, donde las versiones de discusiones internas en el oficialismo comienzan a tomar cada vez más forma.

Ante la presunta división instalada en los medios entre los perfiles de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, desde Casa Rosada ahora intentan blanquear las diferencias de perfiles que conviven en el seno del Gobierno, en búsqueda de darle transparencia a la estructura política que hoy sostiene al Frente de Todos.

Así lo demuestran distintas declaraciones públicas emergidas desde la cúpula de Nación, donde las aguas se agitan cada vez que CFK realiza una intervención pública fuerte, casi siempre tomada a nivel mediático como una disputa de poder y un “condicionamiento” del kirchnerismo hacia las decisiones de Alberto Fernández.

“En el peronismo las discusiones se dan así. El acto del viernes fue muy importante. Todas las voces del acto eran nuestras, hablando con el conjunto de la sociedad y mostrando que tenemos las tensiones de una fuerza real que gobierna. No solo son estas, sino otras también, más intensas y en varios planos”, fueron las palabras del ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel katopodis, una de las figuras más fuertes del Frente de Todos en la plana nacional, en diálogo con Radio Con Vos.

“Hay una visión que es falsa respecto a las construcciones políticas o a que el Gobierno se hace con un modo comando o todos alineados. Siempre hubo nombres fuertes, Perón, evita, Néstor, CFK, hoy es Alberto Fernández. Lo más importante es que todos los que estamos en el gobierno tenemos muy en claro qué venimos a hacer”, señaló Katopodis luego en conversación con CNN en  español.

Mientras promedia diciembre aún con fuertes desafíos de gestión por delante, el Frente de Todos se ubica ahora en la disyuntiva de mostrarse sólido y unificado, al mismo tiempo de necesitar dar la cara por las diferencias internas cada vez más evidentes. Tras largos meses de letargo por la pandemia de COVID19, el armado del peronismo vuelve a “la rosca” en plena víspera de fin de año.