La ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, se reunió con referentes de la Central de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y de la Iglesia para "llevar tranquilidad" y negociar incrementos: acordaron aumento del 10% en planes sociales y mejoras económicas para los comedores. Los dirigentes sociales consideraron que la oferta fue una "aspirina para una enfermedad terminal".

En el marco de una nueva propuesta en comercios, supermercados e hipermercados planificada para el jueves en rechazo a la política económica del Presidente, Mauricio Macri, su funcionaria se reunió con dirigentes sociales y miembros de la Iglesia para llevar tranquilidad al sector y según trascendió la medida de fuerza habría sido cancelada pero podría retomarse la próxima semana.

Stanley, junto a su vice, Carlos Pedrini, recibió en el edificio donde funciona su cartera, al Coordinador Nacional de Barrios de Pie, Daniel Menéndez; su par de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Juan Carlos Alderete; de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Esteban Castro; del Frente de Organizaciones en Lucha, Mariela Navarro; y del Frente Popular Darío Santillán, Dina Sánchez. También estuvo presente el obispo de Merlo y Moreno, Fernando Maletti.

De acuerdo a lo que se conversó en ese encuentro el Gobierno Nacional otorgó un incremento del 10% en planes sociales en dos partes: agosto y diciembre que llegarán hasta $6000. También el Ejecutivo se comprometió a otorgar mejoras económicas en los comedores y merenderos.

Por otra parte, respecto del bono de $3000 que los movimientos sociales le habían demandado al Gobierno y el incremento extraordinario en la Asignación Universal por Hijo (AUH), Stanley les bajó el pulgar, por lo que la política pública subirá recién en septiembre junto con las jubilaciones.

Menéndez se mostró insatisfecho con lo acordado al asegurar que "nos ofrecen aspirina para una enfermedad terminal". Por su parte, Navarro contó en La Nación que "les planteamos un panorama, nos ofrecieron un aumento escalonado de $500 en planes de empleo, no es serio" y concluyó: "la semana que viene vamos a ir a la puerta de los supermercados".