Luego de que varios funcionarios de la provincia de Buenos Aires alineados con el kirchnerismo cuestionaran “los aumentos de precios injustificados”, la Secretaría de Comercio instruyó este martes a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia a iniciar una investigación por "presuntas prácticas anticompetitivas" de diversas empresas de consumo masivo que elevaron el valor de sus productos "por encima de la inflación general".

La resolución 68/2022 publicada en el Boletín Oficial ordena a Defensa de la Competencia investigar a aquellas compañías "que hubieran aumentado precios durante 2022 como resultado de un abuso de su posición dominante en el mercado”, principalmente “mercados vinculados con la producción y comercialización de alimentos” de “producción mayormente nacional”.

Ahora la Comisión tiene un plazo máximo de 30 días para investigar a cada una de las compañías de producción y comercialización de productos de consumo masivo que subieron sus precios por encima de la inflación y elaborar un informe con avances al respecto.

La investigación ordenada por la Secretaría que conduce Matías Tombolini responde a un informe elaborado por la Subsecretaría de Políticas para el Mercado Interno que indicó que hay empresas que “en el transcurso del presente año, han aumentado precios por encima de la inflación general y de otras variables que afectan a los costos de producción”.

En dicho informe también se señala que estas firmas “podrían llegar a tener posición dominante en los mercados involucrados” y que “la fijación de precios de manera abusiva” podría configurar una conducta anticompetitiva susceptible de sanción.

Según un relevamiento realizado por Analogías y que tomó a 1.280 productos de las principales 30 firmas de consumo masivo, las empresas Coca-Cola, Ledesma, Sancor, Papelera San Andrés de Giles (Felpita, Sweety, Floripel) y Queruclor (Querubín, Trap, Aktiol, Polyana) son las que más aumentaron el valor de sus productos por encima de la inflación en el transcurso de 2022.

Mientras que desde el kirchnerismo lanzaron una campaña con la consigna “si aumentan, no compres”, desde empresas como Ledesma negaron que las subas fueran injustificadas y aseguraron a Télam que la firma estuvo “casi dos años con aumentos por debajo de la inflación” por participar del acuerdo de Precios Cuidados.

Asimismo, la empresa negó contar con una posición dominante y un rol en la formación de precios, pues afirmó que “sólo posee un 17% de participación en la producción de azúcar en la Argentina”.

Sin embargo, el informe de Analogías asegura que estos aumentos que exceden a la inflación se vinculan con un "marcado desplazamiento de las retribuciones" en el valor agregado del sector privado en donde aumentaron los márgenes empresariales en desmedro del salario.