El acto que había organizado el El Grupo Parlamentario Progresista Iberoamericano (Grupo Puebla) para el 12 de diciembre y que iba a encabezar Cristina Fernández de Kirchner luego de su condena en la Causa Vialidad había sido suspendido luego de que la vicepresidenta diera positivo de Covid-19. Este miércoles, sus organizadores confirmaron que la reunión volvería a posponerse y se realizará en marzo. 

Los motivos que desencadenaron la decisión, al menos los que dejaron trascender sus organizadores, guardan relación con la apretada agenda de varios de los participantes del acto, entre los cuales hay ex presidentes de diferentes países de la región.

A través de un breve comunicado, la entidad precisó que el encuentro “Voluntad popular y democracia. Del partido militar al partido judicial, las amenazas a la democracia” se posterga hasta el mes de marzo de 2023.

“Con el respaldo e impulso del propio Presidente de la Nación Argentina, Alberto Fernández, el Grupo de Puebla organiza este encuentro internacional de solidaridad con la ex Presidenta Cristina Fernández, frente a la persecución político-judicial de la que ha sido víctima desde 2015, que quedó de manifiesto con la reciente condena judicial en su contra”, añade el texto publicado por el Grupo Puebla.

La actividad iba a realizarse en el Centro Cultural Néstor Kirchner, donde se llevarían a cabo paneles de debate encabezados por los ex jefes de Estado Rafael Correa (Ecuador), Evo Morales (Bolivia), Pepe Mujica (Uruguay), José Luis Rodríguez Zapatero (España), y Ernesto Samper (Colombia), además de la Vicepresidenta de España, Yolanda Díaz. Asimismo, en el lugar se esperaba la presencia del actual presidente argentino, Alberto Fernández.

Lo cierto es que si bien aún no se definió el día exacto en el que se celebrará el encuentro, la elección del mes no es casual. El 9 de marzo, el Tribunal Oral Federal N°2 que condenó a la ex presidenta dará a conocer los fundamentos de la sentencia de la causa conocida como Vialidad.

Por su parte, el Grupo de Puebla ya había anticipado que la actividad buscaría “denunciar que la actual Vicepresidenta ha sido víctima de un juicio político orquestado por la derecha con operadores de la justicia y medios de comunicación para sacarla del debate democrático”.