Unión por la Patria, el nuevo sello con el que competirá el oficialismo este 2023, se aseguró este mediodía la participación de uno de los actores del ex Frente de Todos que más empujó por unas PASO en los distintos territorios bonaerenses. La Patria de los Comunes, el partido que el Movimiento Evita y Barrios de Pie presentaron en sociedad a mediados de marzo, y que recientemente obtuvo su personería en la PBA, firmó su adhesión al nuevo frente con el que el kirchnerismo, el massismo y el sector alineado con Alberto Fernández buscará una reelección. 

“Seguimos apostando a la unidad y la participación para construir la victoria electoral”, declaró el presidente de La Patria de los Comunes en la provincia, Gildo Onorato, quien junto al vicepresidente del partido a nivel nacional, Daniel Menéndez firmaron hoy “la inscripción en la alianza que encabeza el Partido Justicialista”.

De esta forma, los movimientos sociales intentarán confirmar las candidaturas de cerca de una veintena de referentes que buscan competir por las intendencias en distintos distritos de la provincia. De ellas, las que más ruido vienen haciendo hace ya un buen tiempo son las de Patricia Cubría, diputada provincial y pareja de Emilio Pérsico, en La Matanza, y la del diputado nacional Leonardo Grosso en San Martín.

Junto a ellas, los movimientos sociales pretenden impulsar a Agustín Balladares  en Lanús; Ignacio “Naco” Medina en Marcos Paz; Juan Navarro en Lomas de Zamora; Milagros Moya en Lobos; Lis Díaz en Tres de Febrero; Daniel Yuse en Navarro; Federico Ugo en Tigre; Joaquín Noya en Vicente López; Natalia Peluso en Ituzaingó; Martín Poustis en La Costa; Nicolás Carrillo en Tandil; Luciano Lescano en Necochea; Paola Enrico en San Nicolás; Ricardo Bini en Rojas; Micaela Román en Chivilcoy; y Matías Aguirre en Berazategui.

Por supuesto, estas candidaturas están atadas a lo que suceda en la rosca general por las PASO. Actualmente, en el oficialismo se discuten tres escenarios posibles. El primero, impulsado centralmente por Máximo Kirchner y La Cámpora, plantea que haya listas únicas y no se compartan los candidatos de ninguna categoría entre las boletas. Esta posibilidad es resistida por gobernadores, ya que les dividiría los votos al obligarlos a optar por una sola lista en la cual meter a sus candidatos legislativos, así como también por los intendentes que deberían elegir una lista entre las dos que se presenten perdiéndose los votos de la otra.

¿Qué pasaría si se confirma este escenario y la lista del candidato presidencial a gobernador del kirchnerismo va con los intendentes del PJ en los distritos? Aquí podría darse la extraña paradoja de que los candidatos del Movimiento Evita terminen compitiendo en la lista de Daniel Scioli y Victoria Tolosa Paz como gobernadora. Algo impensado luego de las durísimas tensiones entre las organizaciones sociales y la ministra de Desarrollo Social, solamente imaginable si La Cámpora impone a fuego su criterio acorralando al resto de los sectores. Este, claro está, tampoco sería un escenario cómodo para los intendentes del PJ, que competirían contra postulantes de los movimientos sociales que podrían ser “arrastrados” desde arriba por figuras con mucha instalación pública como el ex gobernador bonaerense y la ministra.

La segunda posibilidad es que la PASO se defina sólo para la categoría presidente, o para presidente y gobernador, unificando las listas legislativas hacia abajo y la de los ejecutivos municipales. En este caso, el armado del kirchnerismo y el massismo debería enfrentar el descontento de los movimientos sociales si no le habilitan las PASO en distritos donde ya vienen trabajan e instalando candidaturas hace meses. 

Las organizaciones cuentan con la habilitación de La Patria de Los Comunes para presentar listas propias, pero luego de la inscripción de hoy al frente oficialista ese movimiento requeriría recurrir a la justicia electoral para pedir su salida y posterior presentación por afuera, por lo que resulta ya casi imposible que el Evita y Barrios de Pie no jueguen con Unidos por la Patria. Hay casos, sin embargo, en los que las organizaciones cuentan con partidos vecinales que también se inscribieron y están en condiciones de presentar listas por afuera dentro de 10 días si no les habilitan las PASO. Un ejemplo es Navarro, con el candidato Daniel Yuse.

Finalmente, el escenario más probable tal como están las cosas es que se habiliten unas PASO a nivel presidencial y quizás también para gobernador, pero que se unifiquen listas hacia abajo con la excepción de los territorios en los que la interna sea inevitable. Esto permitiría que haya PASO para las intendencias en algunos distritos y otros no, y ahí primaría la muñeca política de quienes terminen definiendo en qué municipio se habilitan esas internas y en cuáles no.

Por ahora no hay mayores definiciones que el cambio de nombre de la alianza oficialista, ya que el reglamento del frente no se hizo público y hay tiempo hasta el 19 de junio para presentarlo. En ese sentido, la rosca pasa por el acuerdo al que puedan llegar la alianza entre CFK y Massa con Scioli y Tolosa Paz, que negocian a toda máquina a horas del cierre de la inscripción de alianzas.