El preludio de un escrutinio adverso para la Casa Rosada
Crepúsculo en Costa Salguero
Para la Casa Rosada Cómo es la canción de Pedro Capó, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, apeló a la palabra "contento" para definir el estado de ánimo del gobierno y poner, como el compositor centroamericano narra en su tema la cara al viento. "A nivel nacional tenemos una expectativa muy positiva", dijo en conferencia de prensa desde el búnker de Juntos por el Cambio en Costa Salguero.
Acompañado por los jefes de campaña de la provincia de Buenos Aires y la ciudad de Buenos Aires, Federico salvai y Eduardo Macchiavelli, respectivamente, Peña repitió dos veces más el vocablo "contento" en la primera respuesta, casi como si fuera un estribillo de una canción amarga y llamó a mantener la calma hasta que acabe el escrutinio.
Voceros de la Casa Rosada, no obstante, comenzaron a aceptar la posibilidad de que la fórmula del Frente de Todos se encuentre por encima del oficialismo pero estiman que la diferencia será más ajustada de lo que se difundió por boca de urna. En ese contexto, el premier nacional dijo que "casi todas los boca de urnas son dibujados o truchos", además, calificó las primarias abiertas simultáneas y obligatorias (PASO) como una elección "preliminar" y remarcó que en otros turnos electorales como el de 2015 el macrismo ha crecido en las elecciones generales en comparación con las PASO.
Más tarde, la diputada Elisa Carrió, también sugirió que las elecciones que a ella le "importan" son las generales de octubre.
Así, el recuento de votos para esta noche se asoma cuesta arriba para la fuerza del presidente Mauricio Macri.
No se hagan los rulos
Al filo de las 21 el candidato a senador porteño por el oficialismo, Martín Lousteau, ingresó a la sala de conferencias ladeado por Macchiavelli, su compañera en la lista para la cámara alta, Guadalupe Tagliaferri y los candidatos a diputados Maximiliano ferraro y María Victoria Morales gorleri. El ex ministro de economía kirchnerista y ex embajador argentino en Washington por el macrismo pidió cautela y hasta evitó responder sobre la economía a propósito de los posibles cimbronazos financieros que podría provocar un triunfo holgado de Alberto Fernández y Cristina kirchner.
Asimismo Lousteau se amparó en el libreto de Peña para pedir serenidad a periodistas y ciudadanos en general: tradicionalmente, crece la cantidad de votantes en las generales con respecto a las primarias. "La gente después de las PASO vuelve a pensar su voto", lanzó el último ilustre afiliado a la UCR como para que nadie se haga ilusiones rápidamente.
A los pocos minutos, emergió Horacio Rodríguez Larreta en el escenario central del galpón donde se montó la puesta en escena oficial. Con micrófono inalámbrico y suelto de cuerpo, irrumpió celebrando su gestión y agradeciendo a quienes lo acompañaron con su voto. Llamativamente, y al tiempo que empezaban a notarse las caras largas entre los funcionarios, militantes, simpatizantes y “voluntarios” que no alcanzaban a copar el galpón, apuntó con su verba a los que eligieron otras opciones hoy. “Les pido que nos digan cómo tenemos que seguir cambiando en la Ciudad”, sintetizó el alcalde local y, aunque al ritmo de canciones de Soda Stéreo invitara a subir a la palestra a su compañero de fórmula, Diego Santilli, y a los principales referentes de la tira de senadores y diputados, Lousteau, Tagliaferri, Ferraro y Morales Gorleri, empezaba a atisbarse la decepción creciente.
Apenas pasadas las 22, fue el turno de Macri, quien admitió que su espacio hizo “una mala elección”, lamentó que los argentinos no lo “acompañaran” con el sufragio, mentó una brumosa responsabilidad de la sociedad en lo que venga y hasta confesó que “duele” que no lo hayan elegido. Conciso -o con más carencias verbales que habitualmente-, se despidió sin estridencias y mandó a todos “a dormir”.
Entonces, llegaría el postre de la fiesta, con Carrió. La legisladora chaqueña que ocupa su escaño en el Congreso en representación de los porteños hizo una arenga destemplada con la esperanza de que en octubre se revierta el resultado. Remitió, con ese objetivo, a las elecciones anteriores desde el retorno de la democracia y sugirió que elegir al kirchnerismo sería como volver a Egipto, en alusión a la historia de los pueblos de oriente medio y sus conflictos interreligiosos.