Sumando kilómetros en territorio bonaerense, el presidente Mauricio Macri desembarcó en la Segunda Sección, para recorrer un tramo de la autopista que une Pergamino con Pilar sin la habitual presencia de la gobernadora María Eugenia Vidal. “Estas no son obras que hemos encarado por un tema electoral”, aclaró el mandatario argentino.

Luego de una arenga del intendente de Pergamino Javier Martínez quien llamó a dar vuelta la elección, el presidente brindó unas palabras ante los vecinos allí presentes. "Estamos en un momento difícil. La incertidumbre política hace más difícil llegar a fin de mes”, aseguró Macri y defendió las medidas tomadas por el Gobierno nacional. “Hay que ocuparse de la urgencia", afirmó.

"También hay que ocuparse del futuro y este cemento (señalando el piso) tiene que ver con el futuro", sostuvo el presidente acompañado por obreros y por el Ministro de Transporte Guillermo Dietrich.

Ampliar contenido

Poniendo en valor las obras viales, el presidente volvió a apuntar contra las gestiones anteriores. "Estas no son obras que me hemos encarado por un tema electoral, rápidas, mal hechas, parches, no: son obras hechas con máxima calidad para que duren toda la vida. Y las hemos hecho trabajando con seriedad porque las obras ya han dejado de ser sinónimo de corrupción, de escándalo, de que algunos vivos se lleven la plata de todos los argentinos. Hoy las obras se hacen”, apuntó el presidente.

Para finalizar, Macri volvió a referirse al “momento difícil” que atraviesa el país y llamó a la unidad de los argentinos. “Se que todos al final queremos trabajo y paz”, concluyó.

La agenda de Vidal

En medio de los cortocircuitos que quedaron luego de las PASO, no llamó la atención la ausencia de la gobernadora, quien suele a acompañar al presidente en las recorridas por territorio bonaerense.

Vidal desde el jueves se encuentra en Mar del Plata, apostando a su candidato Guillermo Montenegro y la unidad con la ex precandidata de Juntos por el Cambio, Vilma Baragiola, para quedarse con el distrito gobernador por el ex aliado Carlos Arroyo, un territorio clave para el PRO.

Según notificaron, la gobernadora permanecerá allí hasta este viernes a la noche, por lo que decidió pegar el faltazo y alejarse del presidente Mauricio Macri.