A medida que pasan las horas, los movimientos subterráneos dentro del Congreso para apurar el tratamiento del mega DNU de 366 artículos desregulador de la economía, que el Presidente Javier Milei anunció el 20 de diciembre, tan solo diez días después de asumir.

Al pedido recurrente del bloque de Unión por la Patria (UP), la vicepresidenta y titular del Senado Victoria Villarruel debe lidiar además con la demanda de un grupo de nueve legisladores que responden a las provincias, y también a la UCR, que piden convocatoria a una sesión especial. La pésima relación que Milei sostiene con estos dos sectores, tanto con los gobernadores como con el radicalismo, precipitó los tiempos.

Sabiendo de las complicaciones que va a tener que se apruebe el megaDNU, en el entorno de Villarruel admiten que todo es muy fluctuante, pero está latente el fracaso de la iniciativa. “Victoria va a dialogar con todos los sectores que se pueda, hasta el final”, afirman a Diagonales en su equipo, diferenciando su accionar del Presidente,  aunque saben que la tienen difícil.

Descartan que el llamado a tratar el decreto en la Cámara alta se pueda dar de conjunto entre el oficialismo y los senadores que responden a las provincias más afectadas por las políticas de “motosierra” del Gobierno y sus constantes agravios.

La apuesta de La Libertad Avanza (LLA), luego de rechazar sistemáticamente los pedidos del peronismo en el Senado de tratar el DNU, estaba clara: que se diluya el debate en la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo, que hoy se reúne desde las 14, y que, por otro lado, sea la Corte Suprema la que se expida, a casi un mes de que terminara la feria judicial.

Exclusivo: Radicales afirman que el mega DNU será “rechazado” en el Senado y Villarruel se encamina a la derrota

La excusa del oficialismo es que la Comisión Bicameral debería tratar, antes del mega DNU de Milei, un centenar de decretos de las gestiones anteriores. Incluso desde la oposición dialoguista plantean que este tema no debería demorarlos más de la cuenta.

Si el tratamiento de la normativa pasara al Senado, UP estaría a tan solo cuatro votos de tener cuórum. Ahora cuenta con los 33 propios pero la nómina podría agrandarse.

Al número de peronistas debería sumarse la posición de los senadores que responden a las provincias más insultadas por el Presidente: las del sur patagónico. No sería sorpresa. Tanto el gobernador Ignacio “Nacho” Torres, de Chubut; como sus pares Claudio Vidal, de Santa Cruz; Alfredo Weretilneck, de Rio Negro; y, Rolando Figueroa, de Neuquén, estuvieron presentes en el Congreso esta semana marcándole la cancha al oficialismo.  

Uno de los votos que se presumen que pueden agrandar el número de UP es el de la neuquina Lucila Crexell. Otro, el de la rionegrina Mónica Silva, que responde al gobernador Weretilneck. Se espera que pase lo propio con los santacruceños José María Carambia y Natalia Gadano, en representación de Claudio Vidal

Por el lado del Litoral, se espera que sea el entrerriano Edgardo Kueider quien aporte otro escaño contra el mega DNU, y todavía sigue siendo una incógnita lo que pueda hacer Carlos Espínola.

Este último, junto con los radicales Víctor Zimmermann y Francisco Monti le solicitaron al presidente de la Comisión Bicameral Juan Carlos Pagotto la citación de siete funcionarios nacionales y el debate a fondo del decreto, por lo que hace suponer que tendría una visión negativa y no apoyaría el DNU.

Además de la posición altisonante de los mandatarios provinciales, otro actor de peso es la UCR. Allí hay consenso casi general en todos los sectores de que, como están dadas las cosas hasta ahora, si el mega DNU llegara a la Cámara alta, será rechazado.  

 “Yo creo que si esto no se trata en un tiempo prudencial, corren el riesgo de que se aborde en el recinto del Senado. Y ahí no sé si podrán sostener los votos”, planteó Zimmermann a Diagonales.

En el radicalismo afloran algunos nombres propios, encabezados por Martin Lousteau, que se opondrían al DNU. Otro de este grupo es el vicepresidente de bloque, el fueguino Pablo Blanco, que firmó la convocatoria a sesión sin un pronunciamiento de conjunto del bando “boinablanca”.

También afloran estrategias “intermedias” de mayor acompañamiento como las propuestas tanto por Zimmermann como por la propia Carolina Losada, que plantean el tratamiento “título por título”.

“Creo que tratarlo por partes le aseguraría al Gobierno que se apruebe un gran número de artículos. Pueden sacar tal vez el 60 por ciento o más positivo”, pronosticó la santafesina a Diagonales, que recordó que para que pase eso o para que se trate por ley como “espejo” se debe hacer la modificación de la ley 26.122.

Sin embargo, la senadora también afirma que, hasta el momento, si todo sigue igual será rechazada la normativa.  “(El Presidente) se viene encargando de quemar los puentes con los gobernadores, y también con nosotros”, reflexionó Losada. “Se necesitan acuerdos, no agravios”, sintetizó Zimnermann a este medio.

El plato fuerte de este jueves en la Bicameral será la elección del vicepresidente y secretario, que le correspondería a UP. Todo está por verse, pero el oficialismo se ve en aprietos.