Este miércoles, el presidente Alberto Fernández, acompañado por el ministro de Economía Sergio Massa y el gobernador Axel Kicillof, encabezó un acto en Saliquelló donde se firmó el contrato para la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner. Allí, los dirigentes remarcaron la importancia de contar con "tarifas razonables" que garanticen el acceso al gas y la energía eléctrica a la población. .

Fernández resaltó la importancia de la obra y afirmó que su concreción significa "gas para los argentinos, garantiza que la producción no se interrumpa, y puede convertirnos en proveedores de gas para todo el mundo" . "Nosotros tenemos un insumo central como el gas y queremos llegar a la frontera con Brasil para venderles gas y exportarlo al mundo entero", señaló. 

Durante su discurso, el mandatario criticó al gobierno de Cambiemos al recordar que durante la gestión de Mauricio Macri se intentó hacer algo parecido con un proyecto de Participación Público Privada y consideró que "fracasa porque hace falta la inversión pública, donde no queremos nunca más las tarifas dolarizadas, tienen que estar vinculadas con la sociedad y que los argentinos paguen las tarifas a precios razonables".

"Acá tenemos la prueba de que no es todo lo mismo; no me iría tranquilo de la presidencia si esta obra no se hubiese puesto en marcha. No estaría en paz conmigo mismo si no hago llegar el gas a donde se debe. Hay veces en que el Estado debe tomar la iniciativa porque no todo le interesa al privado; su deber es igualar", expresó.

Además, el Presidente envió un guiño a Máximo Kirchner y la La Cámpora al resaltar que la construcción del gasoducto "se está pagando con los recursos que dieron las grandes fortunas de la Argentina a partir de la ley de aporte solidario".

"A esa grandes fortunas debemos darle las gracias también. No podríamos haberlo hecho sin la ley que impulsó Máximo (Kirchner) y que se sancionó cuando Sergio (Massa) presidia la Cámara de Diputados", exclamó Fernández.

Por su parte, el ministro de Economía se refirió a la situación global de la falta de energía y pidió tener en cuenta “cómo nos hubiese ido este año si este gasoducto ya estuviese hecho”, sumándose a las críticas contra el ex presidente. 

“Gobernar es decidir. La guerra a todo el mundo le está costando en términos económicos y energéticos, en estas horas que se discute la situación de las reservas, quiero contarles cuál fue el impacto más importante: la importación de energía”, indicó Massa. “Gobernar es tomar decisiones y entre dejar salir un poco más de reservas o cortarle el gas y la luz a los argentinos, nuestra decisión fue soltar un poquito de reservas para garantizar la calefacción en casa, la computadora funcionando, las máquinas de nuestras empresas funcionando”, expresó. 

Por su parte, Kicillof aseguró que "con el gasoducto vamos a ahorrar divisas, pero vamos a tener más gas para los hogares y nos va a permitir potenciar la producción local".

"Argentina es un país muy rico, pero a eso hay que agregarle el valor y esto nos va a permitir hacerlo y potenciar una de las joyas del país que es el Polo Petroquímico de Bahía Blanca; además garantiza que la riqueza sea del pueblo argentino, hay que garantizar energía a valores razonables", concluyó.