El 17 de octubre dejó expuestas las fuertes internas del Frente de Todos y el aislamiento de Alberto Fernández, quien no confirmó su asistencia a ninguno de los actos que se realizan para celebrar el Día de la Lealtad Peronista. En cambio, el Presidente encabezó un acto oficial en el que inauguró la finalización de la autopista Ezeiza-Cañuelas y llamó a "no claudicar" el ideario peronista, junto al gobernador Axel Kicillof y el ministro de Economía, Sergio Massa, y otros miembros de su Gabinete. 

Durante el acto, el jefe de Estado anticipó que en los próximos días el Gobierno lanzará un bono para los “sectores más vulnerables y postergados” que actualmente no reciben ninguna ayuda del Estado y oficializará los cambios en el Impuesto a las Ganancias que durante el fin de semana pasado fueron dados a conocer por Massa.

Además, aseguró que discutirá con el Fondo Monetario Internacional una serie de cambios en las pautas del acuerdo firmado a principios de año para garantizar el crecimiento de la economía argentina.

“Vamos a discutir con el Fondo y con todos los que haya que discutir que eso no es un gasto, es una inversión, estamos invirtiendo en calidad de vida”, lanzó Fernández. “Somos peronistas y no podemos olvidarlo; primero los argentinos y las argentinas, vamos a seguir creciendo por mas que los que nos propongan libertad sigan mintiendo”.

El presidente Alberto Fernández inauguró la finalización de la autopista Ezeiza-Cañuelas

Por otro lado, el mandatario dedicó buena parte de su discurso a criticar a Mauricio Macri y a las propuestas que el ex presidente expuso en su nuevo libro, “Para qué”, que llegará a las librerías esta semana. Allí, el fundador del PRO promueve una reforma de la legislación laboral y la privatización de las empresas estatales que no son rentables.

“Me asombra que lo digan, pero más me asombra que lo escriban y lo firmen”, cuestionó Alberto Fernández.  “Me permito en este 17 de octubre, porque es el Día que los trabajadores más recuerdan lo que el peronismo hizo, pedirles que no nos dejemos confundir. Venimos de mucha desazón, de mucho desencanto por el dolor de la pandemia y de la guerra, pero que no nos confundan; nunca podemos hacer una mejor sociedad restringiendo los derechos de quienes viven en esa sociedad”, añadió. 

De esta manera, el Presidente acusó a Macri de buscar "terminar con todos los derechos de los trabajadores" y aunque se definió como un amante de la “libertad”, afirmó que desde algunos sectores en nombre de la libertad quieren imponer “el autoritarismo del dinero y de la ignorancia”.

Si bien Fernández aludió al 17 de octubre en varias oportunidades, no está previsto que esta tarde participe del acto convocado por La Cámpora y por el moyanismo a la Plaza de Mayo. El peronismo, dividido, organizó al menos cinco espacios diferentes para recordar el día que la militancia salió a las calles para pedir la liberación de su líder.

"Si una sociedad se desarrolla en favor de unos pocos, eso es una estafa. Hace falta que el crecimiento llegue a todos y, para eso, hace falta un Estado presente que sea capaz de distribuir adecuadamente esa riqueza que se genera. Por eso somos orgullosamente peronistas", subrayó.