El presidente Alberto Fernández inauguró el hospital del Bicentenario en Ituzaingó. Estuvo acompañado desde Olivos por la directora Ejecutiva del PAMI, Luana Volnovich y el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García. Mientras que participaron desde el distrito gobernado por Alberto Descalzo, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof; el ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis y un grupo de intendentes del conurbano. 

"La metáfora del olvido de los cuatro años (macristas) me da mucha pena porque es haber dejado sin salud a decenas de miles de Argentinos.  Pero me da alegría estar yo inaugurando algo que pensó Nestor, ejecutó Cristina y me toca inaugurarlo", expresó Fernández.

Al tiempo que destacó la unidad que se alcanzó en 2019: "Qué buena idea tuvimos todos nosotros. Si eso no hubiera pasado no le estaría hablando hoy. Axel Kicillof no hubiera sido el gran gobernador que es. Tal vez, Alberto Descalzo hubiera sido más difícil gobernar Ituzaingó. Tal vez Luana Volnovich no hubiera sido nuestra maravillosa interventora del PAMI. Tal vez Ginés González García no hubiera vuelto con su sabiduría, en un momento de pandemia".

A su vez, contó que la titular del PAMI le dio un discurso de Néstor Kirchner sobre su sueño de construir ese hospital en Ituzaingó. Y allí señaló que se considera su "mejor discípulo".  A diferencia de otros discursos, en este caso el Presidente habló en varias oportunidades directamente al Frente de Todos y pidió a sus integrantes estar "más unidos que nunca" para "poner de pie la Argentina, como nos tocó hacer cada vez que fuimos Gobierno".

Durante su exposición, Fernández consideró que Buenos Aires "debe ser la provincia más lastimada por las políticas vividas en los últimos cuatro años". Por ello el mandatario destacó la importancia del hospital que será el primero de la red pública en Ituzaingó y que sumará al sistema de salud 52 camas de internación, contará con 21 respiradores e iniciará sus actividades como un centro sanitario cerrado para personas con Covid-19.

Por su parte, el gobernador Axel Kicillof dijo que éstos “son días de arreglos de deudas”, e hizo referencia al éxito de las negociaciones con acreedores argentinos. “Esa era una deuda financiera, a veces para muchos abstractas, pero hay otras deudas que son igualmente o más importantes, ésta deuda era con la provincia de Buenos Aires y la localidad de Ituzaingó” afirmó en relación a la finalización de la obra sanitaria.

Kicillof criticó el congelamiento de la obra durante la gestión anterior y opinó que se trataba de un “símbolo de abandono y desidia”. Además afirmó que la finalización del hospital “era la postergación de un derecho de los vecinos y vecinas, que lamentablemente tuvieron que observar cómo durante cuatro años una obra que le faltaba poquito, el 10%, estaba abandonada”.

Al finalizar su discurso, el gobernador señaló que no hacía falta "hablar del pasado porque hoy estamos creando en Ituzaingó un futuro mejor, nos acompañan varios intendentes porque este hospital, cuando pase el coronavirus, va a tener muchas especialidades y va a ser un hospital de referencia para la región”.

El municipio de la localidad bonaerense informó que “una vez terminada la pandemia, el hospital retomará su camino original de ser un hospital general de agudos (con 160 camas) integrado al sistema de salud pública de la provincia de Buenos Aires, a través de la Región VII".